Barenboim se marca un tango

Un camarero pas¨® con una botella de whisky camino de los camerinos. Minutos despu¨¦s, Daniel Barenboim, piano; H¨¦ctor Consol¨¦, contrabajo, y Rodolfo Mederos, bandone¨®n, salieron al peque?o escenario del C¨ªrculo de Bellas Artes de Madrid para marcarse un tango. Muy sobrios en sus trajes oscuros, sonaron los primeros acordes de Mi Buenos Aires querido, y a continuaci¨®n, una larga lista de piezas de Carlos Gardel, Piazzola, Ginastera y otros maestros del g¨¦nero que a Barenboim le recuerdan el Buenos Aires en el que vivi¨® hasta los diez a?os y que ahora cuajan en un disco interiorizado y sutil que han grabado a tr¨ªo y que fue lanzado en Par¨ªs hace diez d¨ªas.La idea naci¨® tras la decepci¨®n de Barenboim cuando volv¨ªa a su ciudad natal y se encontraba con que hab¨ªan desaparecido los locales para escuchar el tango cl¨¢sico, seg¨²n cont¨® ayer. En su infancia, su ¨ªdolo era Gardel, cuya creaci¨®n hist¨®rica del tema Mi Buenos Aires querido es recordada ahora en el t¨ªtulo del disco de Barenboim.

"Toda m¨²sica buena tiene mucho coraz¨®n", dijo ayer el int¨¦rprete porte?o. "`Y el tango tiene tanta riqueza musical que no se puede considerar de segunda categor¨ªa". Una hermana de la madre de Barenboim falleci¨® hace una semana, pero el artista a¨²n sigue teniendo familia y amigos en Buenos Aires, y, cuando vuelve a sus or¨ªgenes, dice respirar a gusto sus ra¨ªces latinas, pese a que vive la mitad del a?o en Chicago y la otra en Berl¨ªn, donde tiene fijado el domicilio (en la ciudad americana dirige la Orquesta Sinf¨®nica, y en Berl¨ªn, la Opera Estatal). "Pero sigo siendo latino", afirma Barenboim, "y por eso me siento muy a gusto en todos los pa¨ªses latinos. Los anglosajones, con todas sus virtudes, no saben disfrutar de la vida, ?es verdad o no? No saben sentarse en un caf¨¦, sorberlo lentamente y no hacer nada".

Barenboim, un m¨²sico superdotado que lo mismo da la vuelta al piano a las Variaciones Goldberg, de Bach, que realiza una extraordinaria grabaci¨®n del Trist¨¢n e Isolda wagneriano (publicada el a?o pasado y la culminaci¨®n hasta el momento de su carrera como director), se muestra sorprendido por la recepci¨®n positiva que est¨¢ teniendo su disco de tangos. "Hay mucha gente desilusionada con el desarrollo del pop en los ¨²ltimos diez a?os", comenta, "pese a que creo que muchos int¨¦rpretes de la m¨²sica cl¨¢sica deber¨ªan aprender de la energ¨ªa interior del pop. Pero la m¨²sica popular sigue teniendo un aspecto un poco primitivo, desde Elvis hasta hoy; en cambio, el tango no tiene ese deje primitivo, es m¨¢s visceral y posee un refinamiento natural que al mismo tiempo es accesible".

Mi Buenos Aires querido es un disco instrumental, y muchos aficionados quiz¨¢ echar¨¢n de menos la voz. Barenboim anunci¨® ayer la culminaci¨®n de un viejo proyecto, con el tenor Pl¨¢cido Domingo, de grabar un disco de tangos. "Estuvimos en Chicago hace unos d¨ªas", se?ala, "y ya me dijo que ahora tenemos que grabar el nuestro, con orquesta o un peque?o grupo".

En Mi Buenos Aires querido aparecen cl¨¢sicos como A fuego lento, Verano porte?o, La moza donosa y el cl¨¢sico de Gardel El d¨ªa que me quieras. La selecci¨®n no obedece a criterios hist¨®ricos, sino m¨¢s bien al gusto personal de los m¨²sicos y a la necesidad de complementarse para la grabaci¨®n; de hecho, los tres int¨¦rpretes ensayaron un viernes y un s¨¢bado y entraron un domingo al estudio en una ¨²nica sesi¨®n de registro sonoro.

Barenboim dice que ha tratado de llegar con los tangos a sus ra¨ªces. "Cuando se ve el mundo", afirma, "con todos los problemas pol¨ªticos, econ¨®micos e ideol¨®gicos, uno se da cuenta de que las ra¨ªces no son geogr¨¢ficas, sino interiores, est¨¦ticas y filos¨®ficas Al g¨¦nero por excelencia del esp¨ªritu porte?o, Barenboim se acerca con criterios musicales muy claros: "El balance entre un ritmo muy estricto que no tolera ninguna concesi¨®n y un lenguaje arm¨®nicoy mel¨®dico muy libre".

El concierto de tangos de Barenboim ayer en Madrid contribuye a hacer de la ciudad un centro musical de altura en estos d¨ªas, ya que a ¨¦l se suman el director James Levine, Pl¨¢cido Domingo, la soprano Ren¨¦e Fleming y la mezzosoprano Waltraud Meier, que actuar¨¢n hoy y ma?ana, y el director Zubin Mehta, que se presenta hoy. Precisamente Waltraud Meier interpreta a Isolda en la grabaci¨®n de Barenboim, quien este verano volver¨¢ al festival de Bayreuth con la nueva producci¨®n que el nieto de Wagner, Wolfgang Wagner, estrenar¨¢ de Los maestros cantores, con Ren¨¦e Fleming como Eva.