El palco de Canal +

El palco de Canal + ha colocado el cartel de "No hay billetes", como correspond¨ªa al ambiente de la plaza de toros de Las Ventas en su semana fant¨¢stica. Y es que las emociones se han sucedido: el martes, Cristina S¨¢nchez demostr¨® que estaba madura para convertirse en torero, y congreg¨® a un buen n¨²mero de incondicionales, que le prodigaron piropos y puros. Luis Racionero -adem¨¢s de revelarse como un devorador de habanos- aport¨® la nota erudita al recordar que en las pinturas del palacio de Knossos, en Creta, las que saltaban por encima de los toros eran mujeres, con lo que vino a demostrar que est¨¢ todo inventado.Cristina Higueras recibi¨® la llegada al ruedo de la novillera con un puro que despach¨® con naturalidad. En la segunda faena comparti¨® aplausos y petici¨®n de oreja con Remedios Cervantes, que gritaba al presidente para que no se hiciera tanto de rogar. Los eruditos le explicaron que una oreja en Madrid vale m¨¢s que un piso en Serrano y hay que guardar las formas. Emocionado y al borde de las l¨¢grimas se puso Gregorio S¨¢nchez, profesor de Cristina en la Escuela de Tauromaquia y uno de los primeros en apostar por ella. Cristina demostr¨® que es alumna agradecida, y dedic¨® el triunfo a su maestro. Tambi¨¦n estuvo El Juli, el ni?o torero que anuncian como una revelaci¨®n y que sorprende por la seriedad de sus pocos a?os.

Victorino, ocurrente como siempre, charl¨® con su amigo el pintor Ram¨®n Jes¨²s, autor del cartel de confirmaci¨®n de Cristina en Nimes. Lo suyo fue un flechazo: la Vio torear en Colombia y la ha dedicado varias obras. Junto a Ram¨®n, su hijo Marco Jes¨²s, que contin¨²a la profesi¨®n de su padre y ha sido el triunfador de la ¨²ltima edici¨®n de Arco. El protagonista de la an¨¦cdota m¨¢s reveladora fue el matador jerezano Juan Jos¨¦ Padilla, al que no le importar¨ªa perder dos muelas como Rafaelillo si le premiaran con dos orejas. ?Ah¨ª queda eso, por si alguien olvida que son seres muy especiales!

Cristina S¨¢nchez apareci¨® radiante el mi¨¦rcoles, con traje azul y flequillo de peluquer¨ªa: puede ser torero, so?ar con la puerta grande y tutear a Versace. Recibi¨® muchas enhorabuenas, como la de I?aki Gabilondo, que debut¨® en el palco y comparti¨® opiniones con Juan Echanove, que cumpl¨ªa su sue?o de ver a Vicente Barrera (pas¨® un susto de muerte cuando su segundo toro le peg¨® un buen revolc¨®n). A su lado, su madre, ?ngela Lavanda, que debe ser de las pocas madres que puede presumir de su ficenciatura en tauromaquia -con diploma acreditativotras completar tres cursos de verano en la Universidad Complutense de El Escorial. Curro V¨¢zquez no ha seguido cursos, pero se le pone la carne de gallina cuando escucha los aplausos. Se declara retirado convencido, pero su club de nost¨¢lgicos pide a gritos que les d¨¦ una alegr¨ªa.

El jueves deseado

Y lleg¨® el jueves m¨¢s deseado, el que nadie se quer¨ªa perder. El Rey y la infanta Elena ocuparon una barrera, mientras la condesa de Barcelona la sigui¨® desde su palco. Los componentes de Tricicle se definieron como "aprendices de aficionados", que podr¨ªan montar un espect¨¢culo con el mundo taurino como tema, al igual que eligieron el deporte, el terror o las teleseries. Se marcharon al caer el quinto porque les esperaba la clientela en el teatro de La Latina. Jos¨¦ Ram¨®n de la Morena se fue satisfecho con la serie de quites entre Joselito y Enrique Ponce, pero esperaba m¨¢s de un Madrid-Bar?a.Baldomero Hern¨¢ndez, director del hotel Tryp Reina Victoria, cont¨® que los toreros son de poco comer y mucho cenar. No es raro que a las doce de la noche aparezcan Jesul¨ªn y Litri para compartir el pat¨¦ especial de la casa. Tuvimos suerte de que Marisa, esposa del matador Juan Mora (embarazada de siete meses), fuera una mujer templada que controla sus emociones y no se pusiera de parto en el palco. La c¨¢mara de Maribel tomar¨ªa unos planos espl¨¦ndidos mientras anunci¨¢bamos: "?Que viene, que viene! ?Es ni?o y se llamar¨¢ Juan!"