Descodificador: una gu¨ªa en la selva de canales

Aunque no tiene dudas sobre el ¨¦xito final de las tecnolog¨ªas digitales, el doctor Hans-Georg Junginger, vicepresidente y director de investigaci¨®n de Sony Europa, reconoce que los nuevos productos y servicios est¨¢n siendo impulsados por la industria y que la demanda todav¨ªa est¨¢ por crear. La abundancia de cadenas plantea al mismo tiempo la cuesti¨®n del suministro de programaci¨®n y de sus bazas comerciales. El telespectador corre el riesgo de perderse en esta selva.Ser¨¢ necesario desarrollar herramientas de navegaci¨®n comparables con las que est¨¢n apareciendo en Internet. De forma paralela, los descodificadores se convertir¨¢n en aut¨¦nticos ordenadores, llaves imprescindibles para esta televisi¨®n interactiva.

Sony, que fabrica descodificadores para la cadena francesa Canal Plus o para la estadounidense Direct TV, empezar¨¢ a producir sus descodificadores en serie este mes. Es una forma de mantenerse en los primeros puestos en una carrera que probablemente ser¨¢ m¨¢s un marat¨®n que un sprint.

"Impulsamos la televisi¨®n digital porque no hay duda de su ¨¦xito, pero llevar¨¢ su tiempo", explica Junginger, quien recuerda que el disco compacto de audio necesit¨® 12 a?os para convertirse en algo cotidiano.

Para no perderse

Con la televisi¨®n digital, el gran p¨²blico descubrir¨¢ otra consecuencia de esta t¨¦cnica: la abundancia. Efectivamente, la compresi¨®n digital permite transmitir 10 o 12 programas en un canal que actualmente s¨®lo transporta una cadena anal l¨®gica.Las implicaciones son muchas. En el futuro, el p¨²blico tendr¨¢ que acostumbrarse a pagar m¨¢s por ver la televisi¨®n. Y la nueva factura no ser¨¢ tan discreta como el canon actual [la tasa que se paga por tenencia de televisores en casi toda Europa, excepto en Espa?a] o tan indolora como la publicidad.

Por lo dem¨¢s, la profusi¨®n se ve acompa?ada de un riesgo de confusi¨®n. Al multiplicar su n¨²mero por 10, las cadenas se especializar¨¢n e inventar¨¢n nuevos servicios. Esto puede desconcertar al telespectador acostumbrado a la estandarizaci¨®n actual de las programaciones.

Los descodificadores, muy perfeccionados en relaci¨®n con los modelos actuales, desempe?ar¨¢n un papel cada vez m¨¢s importante. Para evitar que el usuario se pase horas explorando los cientos de cadenas disponibles, los descodificadores ir¨¢n dotados de gu¨ªas electr¨®nicas. Es una oportunidad para los suministradores de equipos: estos complejos aparatos ser¨¢n llaves inevitables.

Le Monde / EL PA?S