Libros er¨®ticos

Cuando le¨ª en EL PA?S la noticia de que el Ayuntamiento de Pozuelo hab¨ªa repartido, por error, libros er¨®ticos a 1.000 ni?os, mi primera reacci¨®n fue la risa. La concejal¨ªa de Cultura se defend¨ªa diciendo que ellos no hab¨ªan patrocinado la edici¨®n, a pesar de que as¨ª se dec¨ªa en el libro, y la edil de Educaci¨®n dec¨ªa que lo sent¨ªa, que no los hab¨ªa le¨ªdo. Esto no deber¨ªa extra?arme, dado que se trata de un Ayuntamiento del PP, y todos conocemos sus h¨¢bitos culturales. Pero lo que s¨ª me ha extra?ado, e incluso escandalizado, es que los redactores de la noticia en EL PA?S tampoco se hayan molestado en leer el libro, que lo descalifiquen tan a la ligera, demostrando su falta de cultura.Se trata de Acostarse con la reina, del gran escritor franc¨¦s Roland Topor, un libro con relatos fant¨¢sticos, surrealistas, er¨®ticos, humor¨ªsticos y violentos, pero en resumen un libro excelente y divertido, y perfectamente apropiado para ser le¨ªdo entre los 12 y los 16 a?os (edad de los ni?os a los que se les regal¨® el libro), de modo que este reparto de libros ha sido probablemente lo ¨²nico bueno que ha hecho ese Ayuntamiento por la cultura. Ya me hubiera gustado a m¨ª que me lo regalaran, pues yo tuve que leer un ejemplar de una biblioteca municipal.

Por otro lado, en el suplemento del domingo de esa misma semana, podemos leer una columna de la precoz escritora Violeta Hernando (14 a?os), que jam¨¢s hubiera escrito su primera novela si no hubiera tenido la suerte de haber le¨ªdo a autores como Barry Gifford o Ray Loriga, tan er¨®ticos como Topor aunque carentes de su calidad literaria. No creo que sea importante la distinci¨®n entre libros para ni?os y libros para adultos, o la separaci¨®n en g¨¦neros, pues lo ¨²nico que realmente cuenta es la diferencia entre buena y mala literatura.-