Los otros candidatos

Las elecciones del domingo se han convertido en bipolares y nadie duda de que a la segunda ronda pasar¨¢n el actual jefe de Estado, Bor¨ªs YeItsin, y el l¨ªder comunista, Guennadi Ziug¨¢nov. Sin embargo, estos pol¨ªticos necesitar¨¢n los votos de los candidatos derrotados para poder ocupar el sill¨®n presidencial. De los ocho que ser¨¢n eliminados pasado ma?ana, al menos cuatro pueden tener vital importancia a la hora de las alianzas que deber¨¢n hacer Yeltsin y Ziug¨¢nov si quieren ganar la presidencia de Rusia.El economista liberal Grigori Yavlinski, de 44 a?os, se presenta como la alternativa democr¨¢tica a Yeltsin. La campa?a publicitaria del l¨ªder de Y¨¢bloko, la cuarta fuerza en el Parlamento ruso, ha sido un fracaso. Yavlinski no ha podido romper el bipolarismo y, como ¨¦l mismo reconoce, el domingo los rusos elegir¨¢n entre dos males, el mal del presente y el del pasado. Yavlinski, aliado natural del actual presidente en la segunda vuelta, se niega, sin embargo, a apoyar a Yeltsin incondicionalmente. Si las encuestas son correctas y en la primera ronda obtiene el 10% de los votos o m¨¢s, podr¨¢ poner sus condiciones, ya que el presidente necesitar¨¢ sin falta al electorado de Yaylinski para ganar en la segunda vuelta y se ver¨¢ obligado a pactar.

Yavlinski estar¨ªa dispuesto a apoyar a Yeltsin si ¨¦ste aceptase realizar una correcci¨®n del curso de las reformas, de manera que se tomasen en consideraci¨®n las necesidades de las grandes masas -en esto no se diferencia mucho de lo propugnado por otros candidatos-, se desmonopolizasen los consorcios petroleros y de gas, y se hiciesen cambios claves en la composici¨®n del Gobierno.

El general Alexandr L¨¦bed, de 46 a?os, es quien m¨¢s ha progresado en el curso de la campa?a electoral. Gracias a una exitosa publicidad y a su lengua mordaz e ir¨®nica, ha doblado el n¨²mero de sus partidarios que, seg¨²n las encuestas, ahora rozan el 10%. Para el p¨²blico, representa al hombre de mano dura que podr¨ªa poner orden en el pa¨ªs; para ciertos intelectuales, es el candidato ideal para hacer el papel de Pinochet. Convencido anticomunista, en su equipo trabajan economistas liberales. En la segunda ronda deber¨ªa ser un aliado natural de Yeltsin, pero el problema es que su electorado dif¨ªcilinente es yeltsinista. L¨¦bed quitar¨¢ el domingo muchos m¨¢s votos a Ziug¨¢nov que al actual presidente, y no est¨¢ claro que despu¨¦s pueda traspasarlos a ¨¦ste o que acepte apoyarle p¨²blicamente.

El oculista Sviatoslav Fi¨®dorov, mundialmente famoso por sus operaciones para curar la miop¨ªa, es uno de los pol¨ªticos m¨¢s contradictorios. Fue pr¨¢cticamente la primera persona que logr¨® crear una empresa al margen del Estado en la ¨¦poca sovi¨¦tica, pero es contrario a la empresa privada tradicional y piensa que ella debe pertenecer todos los trabajadores. Partidario del jover Marx y defensor de Pinochet, te¨®ricamente es un aliado natural de Ziug¨¢nov, pero su electorado votar¨ªa m¨¢s f¨¢cilmente por Yelstin que por el l¨ªder comunista. De ah¨ª que no sea seguro que este socialdem¨®crata pueda trasvasar sus votos a Ziug¨¢nov en la segunda vuelta ni que intervenga p¨²blicamente a favor de ¨¦ste. Por lo dem¨¢s, Fi¨®dorov no excluye un pacto con Yeltsin.

El ultranacionalista y antisemita Vladimir Zhirinovski, el gran ganado de las elecciones parlamentarias de 1993, de 50 a?os, contin¨²a su declive y sus posibilidades de obtener el sill¨®n presidencial se han esfumado. Ahora p¨²blicamente propugna una alianza con Ziug¨¢nov, lo que parece natural, ya que su electorado, como el de los comunistas, est¨¢ constituido principal mente por gente pobre y nost¨¢lgica de la grandeza que antes ten¨ªa Rusia y que personificaba la Uni¨®n Sovi¨¦tica.

Sin embargo, la experiencia muestra que, a pesar de sus agresivas declaraciones, Zhirinovski siempre ha apoyado en el Parlamento al actual r¨¦gimen, y no se puede descartar que en la segunda ronda llame a votar por Yeltsin.

De los otros cuatro candidatos -que seg¨²n los pron¨®sticos obtendr¨¢n menos del 1%, m¨¢ximo un 2%, de los votos- dos son socialdem¨®cratas: el ex presidente de la la URSS, Mija¨ªl Gorbachov, y Mark Shakkum, vicepresidente del Fondo de Reformas Econ¨®micas y Sociales. El escritor y ex campe¨®n mundial y ol¨ªmpico de halterofilia, Yuri Vl¨¢sov, es un nacionalista moderado. Viad¨ªmir Brints¨¢lov, empresario multimillonario, puede competir con Zhirinosvki por el t¨ªtulo de payaso de la campa?a electoral. Coquetea con la terminolog¨ªa socialista y aprovecha las elecciones para hacerse publicidad.