"Esto es una universidad, se acab¨® el parlamento de verano"
Cuando a Jos¨¦ Luis Garc¨ªa Delgado, rector desde noviembre de la Universidad Internacional Men¨¦ndez Pelayo (UIMP), le sugieren que los cursos de verano son una forma de vestir de seda acad¨¦mica la mona de las vanidades pol¨ªticas, enarca las cejas y se limita a responder: "Mire usted, yo soy hijo de un maestroes cuela". La mayor ambici¨®n de este catedr¨¢tico de Econom¨ªa Aplicada, madrile?o de 52 a?os, es que la universidad de verano santanderina se convierta bajo su mandato en eso, en una universidad. ?ste ser¨¢ el primer verano del nuevo rector en el palacio de la Magdalena, sede c¨¢ntabra de la instituci¨®n.Pregunta. ?No habr¨¢ descubierto usted un agujero financiero en la Men¨¦ndez Pelayo?
Respuesta. Nada de eso. S¨®lo faltaban por abonar a nuestro casero, el Ayuntamiento de Santander, dos plazos anuales de alquiler.
P. ?Y qu¨¦ tal est¨¢n los alquileres en la Magdalena?
R. Cien millones al a?o. Lo que no es precisamente una cantidad simb¨®lica, como dijo una vez alg¨²n periodista.
P. Su nombramiento se produjo poco antes de un m¨¢s que previsible vuelco de Gobierno. ?Qu¨¦ tiene usted para ser candidato de consenso?
R. Mi curr¨ªculo. Siempre he sido profesor universitario y todos mis m¨¦ritos son acad¨¦micos. Creo que pensaron en una persona de relieve m¨¢s acad¨¦mico que pol¨ªtico.
P. ?Se acab¨® la competencia y polarizaci¨®n pol¨ªtica entre Santander y El Escorial?
R. Le he dicho al rector Pujol [de El Escorial] que mi ¨¢nimo es evitar pugilatos absurdos. Las dos somos universidades p¨²blicas y tenemos obligaci¨®n de gastamos bien los dineros y sacarles buen provecho social. Potenciaremos la colaboraci¨®n. Si hay que traer un experto norteamericano, nos ahorraremos la mitad cada uno. Pujol respondi¨® estupendamente. Adem¨¢s, no es fatuidad, pero nuestro programa es tan novedoso este a?o que, la verdad, no me asustan las comparaciones.
P. ?Qu¨¦ novedades hay?
R. La m¨¢s radical son los cursos magistrales, que dar¨¢n en verano un producto homologable y convalidable con lo que se hace en el resto de las universidades en periodo escolar normal. Por ejemplo, el curso normal de Emilio Alarcos en la Universidad de Oviedo cubre de noviembre a abril unas 30 horas. Pues bien, nosotros damos esas mismas 30 horas en una semana. Y, adem¨¢s, los cr¨¦ditos que obtengan los alumnos los homologar¨¢n en cualquier universidad para cursos de doctorado o cr¨¦ditos de libre elecci¨®n en licenciaturas.
P. ?Han respondido los alumnos?
R. Las matriculaciones en esos cursos con cr¨¦ditos son las que mejor van. Ya ver¨¢ usted c¨®mo dentro de cuatro o cinco a?os nos copiar¨¢n otras universidades de verano. No s¨¦ c¨®mo no se le ha ocurrido antes a alguien. Los alumnos no son ahora como en mi ¨¦poca, se han hecho muy pragm¨¢ticos, m¨¢s agarraos con sus curr¨ªculos. Y me parece bien: esto es una universidad, no un centro de animaci¨®n.
P. Vicente Molina Foix escribi¨® el a?o pasado que los cursos de verano son como los bolos de la gente de teatro. Defi¨¦ndase.
R. Eso es precisamente con lo que quiero terminar. El circuito de verano es una f¨®rmula cara, gastada, y hay que romper con eso. Tuvo su sentido en los ochenta, cuando Ra¨²l Morodo llam¨® a la UIMP "parlamento de verano". A la opini¨®n p¨²blica espa?ola le ven¨ªa muy bien un foro de ese tipo, donde se pudieran debatir grandes cuestiones nacionales. Pero una vez que el pa¨ªs se ha normalizado, que la vida universitaria transcurre por sus cauces, y la pol¨ªtica por los suyos, una entidad que se llama universidad tiene que ser eso, una universidad. Que se juegue lo menos posible a los bolos.
P. ?Seguir¨¢ su universidad extendi¨¦ndose a otras ciudades?
R. Mi apuesta es Santander. En los ¨²ltimos a?os ha habido un desparramamiento geogr¨¢fico, y eso no puede ser. Quiero reidentificar la Men¨¦ndez Pelayo con Santander, su sede originaria y emblem¨¢tica, su marca. Este a?o habr¨¢ un 30% m¨¢s de cursos en Santander.
P. ?Y un 30% m¨¢s de presupuesto?
R. No. El presupuesto transferido por la Administraci¨®n central est¨¢ congelado desde 1992 en 700 millones. Pero hemos ampliado los fondos de instituciones y fundaciones p¨²blicas y privadas. Mi objetivo es que los patrocinadores doblen lo que da el ministerio, y llegar a superar los 2.000 millones. Este a?o nos hemos quedado en 1.500.
P. ?Qu¨¦ hizo mal el equipo anterior?
R. Estuvo dos a?os y¨¦ndose: en los ¨²ltimos a?os la programaci¨®n era ya muy rutinaria.
P. ?Le van las vanguardias?
R. Lo dijo Rilke: "En est¨¦tica, c¨¢nones de eternidad".
P. Tambi¨¦n dijo Borges que no hay lugar m¨¢s eterno que el hoy fugaz.
P. Pero acab¨® se?alando: "De joven me gustaban los atardeceres, las orillas y el barroco. Ahora admiro el d¨ªa, el centro y la l¨ªnea recta".
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