Espa?a, hacia una "sociedad de profesionales" con unos empresarios sin visi¨®n de futuro

Espa?a se encamina a una "sociedad de profesionales" pero los empresarios carecen de visi¨®n de futuro a medio y largo plazo y por tanto no hay desarrollo econ¨®mico ni social adecuado, se?ala el informe Espa?a 1995, una interpretaci¨®n de su realidad social, del Centro de Estudios del Cambio Social (CECS). Los profesionales, seg¨²n una encuesta del CECS, desean que la ¨¦tica de la responsabilidad y la competencia en el oficio sean valores b¨¢sicos, pero ven imponerse la corrupci¨®n y el culto al dinero. El informe refleja tambi¨¦n el auge de las ONG y la necesidad de debatir ya el problema del agua.

Las contradicciones presiden la sociedad espa?ola, revela cada una de las casi 700 p¨¢ginas del informe. "Lo que nosotros queremos plantear en el informe es que no hay desarrollo econ¨®mico sin desarrollo social, y que el desarrollo social tambi¨¦n genera desarrollo econ¨®mico", dice Jos¨¦ Mar¨ªa Mart¨ªn Patino, director general del CECS y presidente de la Fundaci¨®n Encuentro, patrocinadora del informe, junto con la Fundaci¨®n Ram¨®n Areces, y la empresa Iberdrola. "El futuro del desempleo es muy oscuro, y tambi¨¦n el del propio trabajo. El pleno empleo ya no volver¨¢ pero es que parecemos ir a un panorama laboral en que el trabajo sea s¨®lo cosa de profesionales y de peonaje".El panorama resulta especialmente duro en el campo sociolaboral. "Alguna enfermedad grave debe de aquejar a nuestro aparato productivo", apunta el documento, "cuando a lo largo de los ¨²ltimos 35 a?os nuestra poblaci¨®n ocupada no ha variado de forma significativa. En 1961 cont¨¢bamos con 11.581.000 empleados; la Encuesta de Poblaci¨®n Activa de 1995 cifra, la media anual en 12.042.000".

En esas cifras se oculta, adem¨¢s, que la tasa de actividad de los hombres es el doble que la de las mujeres: 51,33% frente a 25,15%; en el paro, cambian las tornas:18,2% de hombres y 30,6% de mujeres.

En los ¨²ltimos 20 a?os, aunque el analfabetismo femenino se ha reducido a la mitad, y el porcentaje de mujeres con estudios universitarios medios supera en este momento al de hombres, el paro femenino creci¨® en 26 puntos, mientras el masculino lo hac¨ªa en 13.

Mart¨ªn Patino atribuye una responsabilidad especial en esta situaci¨®n al "bajo nivel educativo de los empresarios espa?oles. Su carencia de visi¨®n a medio y largo plazo est¨¢ relacionada con el hecho incontestable, y sumamente preocupante, de que no tenemos ni una gran empresa espa?ola entre las 100 primeras del mundo por volumen de negocios. El porcentaje de grandes empresas (m¨¢s de 250 trabajadores) en Espa?a es exactamente la mitad que el de la media de la UE.

Las paradojas del empleo

El informe plantea: hoy se necesita un trabajador para producir lo que cinco en 1962. De ah¨ª que califique de "paradoja" el hecho de que "cuando se habla de crear empleo, nadie se plantee la inadecuaci¨®n de los mercados, las empresas y administraciones como causas principales del desempleo". Para los autores queda claro que la jerarquizaci¨®n y rigidez de la empresa espa?ola y europea explica la posici¨®n comercial desventajosa con Estados Unidos."Hay una tendencia muy marcada a quedarse en una perspectiva a corto plazo", dice el informe sobre los empresarios espa?oles. "En casi el 60% de las empresas la planificaci¨®n abarca un periodo m¨¢ximo de un a?o. S¨®lo entre un 25% y un 30% ampl¨ªa ese horizonte hasta los tres a?os.

La calidad del servicio sanitario se plantea como uno de los problemas por resolver. "Conviene recordar", dicen los autores, "que muchas de las quejas tienen que ver con las listas de espera, que son un mecanismo de racionamiento para evitar que se dispare el consumo sanitario. Es decir, es un modo de contener el gasto. Esto nos introduce en el verdadero problema actual de los sectores sanitarios en todos los pa¨ªses desarrollados: la limitaci¨®n de los recursos econ¨®micos".

Uno de los cap¨ªtulos m¨¢s extensos del informe es el dedicado al nuevo y creciente fen¨®meno de las organizaciones voluntarias de solidaridad. En 1991, dos de cada tres personas hab¨ªan dado dinero en el mes anterior a alguna forma de solidaridad social. "Lo nuevo no es la solidaridad ciudadana de los particulares", se?ala el informe, "sino su capacidad de hacerse o¨ªr como voz p¨²blica. Es hoy un interlocutor valioso en el dise?o y gesti¨®n de las pol¨ªticas sociales".

El problema del agua est¨¢ lejos de atajarse. El CECS llama, ahora que los pantanos est¨¢n a rebosar, a discutir este asunto que "compromete seriamente la calidad de vida de los ciudadanos y el desarrollo de un modelo de ordenaci¨®n del territorio que sea equilibrado desde el punto de vista econ¨®mico, social y me dioambiental". Se trata de poner fin a Ias guerras por un agua subvencionada", partiendo de la base de que "el agua empleada actualmente para el riego permitir¨ªa el abastecimiento de unos 220 millones de habitantes".

El informe denuncia el abuso y descontrol de las aguas subterr¨¢neas, y la insuficiente explotaci¨®n de la v¨ªa de depuraci¨®n de los recursos h¨ªdricos. En cuanto al fen¨®meno de los cambios en las telecomunicaciones a consecuencia de las nuevas tecnolog¨ªas, el informe se pregunta si "adem¨¢s de asistir a una revoluci¨®n tecnol¨®gica, no estaremos tambi¨¦n ante una revoluci¨®n social" y, sobre todo, estima que se trata de algo que "no se origina de forma natural y desinteresada". El resultado es "una fuerte sensaci¨®n de inseguridad en todos los estamentos pol¨ªticos, acad¨¦micos y de investigaci¨®n".