Carta de amor al pelot¨®n
Estimados colegas del Tour: ayer le¨ª que un jugador de f¨²tbol val¨ªa 2.300 millones de pesetas; otro pag¨® por su libertad unos 1.300 millones; esto no para. Miles de millones bailan su danza imp¨²dica sobre la espalda de un futbolista que publicita la indecencia como si fueran rosquillas de an¨ªs de la abuelita. Desde ni?o me gusta y me abruma y me da asco y rabia el f¨²tbol. "Siempre ha sido as¨ª": este lema. de la resignaci¨®n lo llevo atragantado, y m¨¢s ahora con vosotros en el pelot¨®n, sin una gorda, ejerciendo de h¨¦roe para costear los desmanes de esta sociedad rebozada en la mierda: Me rebelo, me cisco en dicha sociedad y en sus electos dirigentes y me masturbo en las orejas de las hormigas para que mi desesperaci¨®n sea perfecta y l¨²cida. Quiero ser millonario, pero no futbolista, ni banquero ni relaciones p¨²blicas de los fondos reservados: Soy del pelot¨®n, como vosotros, pobres diablos ignotos, padres de las risotadas de tanta canalla disimulada de d¨ªa de fiesta para consuelo de todos los pelotones. Por favor os lo pido: apearos de la bici, isalvajes!, y dejemos de ser el pelot¨®n y caminemos incluso sin rumbo...-
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.