Nueva maniobra de Francia para recortar las subvenciones de la UE

Francia ha hado un paso m¨¢s en su guerra contra los fondos estructurales de la Uni¨®n Europea (UE). Con la coartada del rigor, propone que los embajadores de los Quince aprueben hoy en el Coreper una reducci¨®n de 408.000 millones de pesetas en el proyecto de presupuesto para 1997. La maniobra acabar¨ªa afectando principalmente a la pol¨ªtica de reequilibrio regional y social, con notorio perjuicio para Espa?a.

Par¨ªs desencaden¨® hace tiempo la guerra contra la pol¨ªtica de solidaridad intercomunitaria. Abri¨® la caja de los truenos, en enero de 1995, el entonces primer ministro Edouard Balladur, quien propuso a hurtadillas -a trav¨¦s de los periodistas franceses, pero con la condici¨®n de que no mencionasen la fuente- recortar los fondos estructurales, escud¨¢ndose en que la futura ampliaci¨®n de la UE al Este costar¨¢ dinero y tratando de que esa factura no merme la pol¨ªtica agr¨ªcola, de la que Francia es principal beneficiaria.Despu¨¦s fue su jefe de gabinete, Yves-Thibault de Silguy, transformado en nuevo comisario de Asuntos Monetarios, quien trat¨® de reducir la entrega de las subvenciones a los pa¨ªses que no accedan al euro e incumplan los requisitos de convergencia. Este conato, que atenta contra la legalidad consagrada en el Tratado de la Uni¨®n, ser¨¢ previsiblemente desbaratado oficialmente en la reuni¨®n de la Comisi¨®n del pr¨®ximo d¨ªa 30.

El tercer intento ha surgido en el Comit¨¦ Presupuestario, en uno de los m¨²ltiples recodos del camino que recorre la elaboraci¨®n del presupuesto comunitario anual. El representante franc¨¦s ha propuesto un recorte de 2.550 millones de ecus (408.000 millones de pesetas) de cr¨¦ditos de pago en tres partidas: Feoga-garant¨ªa (1.000 millones de ecus), que no afectar¨ªan a los gastos para la caba?a vacuna; fondos estructurales (otros 1.000), del que se excluir¨ªa el de cohesi¨®n; y pol¨ªticas internas y externas (550 millones de pesetas).

La propuesta aparenta ser as¨¦ptica, porque incluye ahorro agr¨ªcola, lo que perjudica en teor¨ªa al pa¨ªs que la lanza. Pero expertos en la t¨¦cnica presupuestaria de Bruselas aseguran que la partida del Feoga ser¨ªa f¨¢cilmente recuperable, mientras que el recorte s¨®lo acabar¨ªa afectando a las pol¨ªticas de solidaridad. Holanda, Reino Unido y Alemania se inclinan a apoyar hoy la idea francesa en el Comit¨¦ de Representantes Permanentes (Coreper). Italia no se ha definido todav¨ªa. Y Espa?a prev¨¦, en caso de que la maniobra tenga ¨¦xito, acudir al Parlamento Europeo -la otra autoridad presupuestaria- para desmontarla.

El gran argumento que utiliza Par¨ªs es la necesidad de austeridad presupuestaria. Por debajo del mismo palpitan las grandes dificultades francesas a la hora de cumplir las condiciones de convergencia para la moneda ¨²nica y la consiguiente pulsi¨®n por reducir, aunque sea ara?ando cantidades relativamente peque?as, su aportaci¨®n al presupuesto com¨²n. La Comisi¨®n lanz¨® un borrador de presupuesto ya anclado en la austeridad, con un alza sobre el de 1996 del 3%, pr¨¢cticamente equivalente a la inflaci¨®n. Es decir, en t¨¦rminos reales, pr¨¢cticamente con crecimiento cero. Pero la enmienda francesa ha apretado a¨²n m¨¢s las tuercas. De triunfar, el presupuesto ser¨ªa nominalmente inferior al de 1996, indican fuentes del Comit¨¦ Presupuestario.

La propuesta adquiere toda su relevancia en t¨¦rminos hist¨®ricos: el presupuesto a la francesa s¨®lo representar¨ªa el 1,16% del PIB comunitario en 1997, mientras que la cumbre de Edimburgo, empujada por Jacques Delors y Felipe Gonz¨¢lez, dio v¨ªa libre a un aumento progresivo de los recursos propios, que en 1997 alcanzar¨ªan. un techo del 1,24% del PIB (y del 1,27%, en 1999). La decisi¨®n, que naci¨® con f¨®rceps, abr¨ªa espacio para aumentar las pol¨ªticas de solidaridad y crear el fondo de cohesi¨®n. ?ste, de momento, no recibe amenazas, pero los otros fondos s¨ª.