Los jueces de Euskadi instruyen casi 700 procesos por delitos de violencia callejera

La Consejer¨ªa de Justicia del Gobierno vasco estima que durante los pr¨®ximos a?os se celebrar¨¢n m¨¢s de 700 juicios por delitos relacionados con la violencia callejera perpetrados desde principios de 1995, fecha en la que el entorno pol¨ªtico de ETA intensific¨® las algaradas. El viceconsejero de Justicia, I?aki S¨¢nchez, ha revelado que las diferentes fiscal¨ªas de Euskadi han presentado m¨¢s de 300 escritos de acusaci¨®n, por hechos relacionados con la violencia urbana sucedidos en Guip¨²zcoa, m¨¢s de 200 en Vizcaya y un n¨²mero algo menor en ?lava.

El Departamento de Justicia del Gobierno vasco, del que es titular el l¨ªder del PSE-PSOE, Ram¨®n J¨¢uregui, considera que para frenar la sensaci¨®n de impunidad "no hay que buscar sentencias ejemplar¨ªzantes con condenas abultadas", sino "sancionar los delitos cuanto antes, aproximar las sentencias al momento en que se producen los hechos".La pol¨¦mica se ha reavivado en el Pa¨ªs Vasco con la sentencia de seis a?os de prisi¨®n e indemnizaci¨®n de 75 millones dictada por la Secci¨®n Tercera de la Audiencia de San Sebasti¨¢n contra tres j¨®venes que abrasaron vivos en 1995 a cinc ertzainas en un atentado con bombas incendiarias en Renter¨ªa (Guip¨²zcoa). La sentencia ha puesto sobre la mesa de nuevo cierta sensaci¨®n social de que los grupos de alborotado res radicales act¨²an con total impunidad.

Un 29% de vascos opina que la seguridad, sobre todo en lo relacionado con la violencia callejera, ha empeorado, lo que supone un incremento de nueve puntos, seg¨²n datos oficiales.

Desde la Consejer¨ªa de Interior se considera que este tipo de sentencias condenatorias, con penas muy alejadas de la petici¨®n fiscal -en el caso de Renter¨ªa, 335 a?os de prisi¨®n-, abren la puerta de par en par a m¨¢s sucesos de este tipo y dan alas a los j¨®venes al borotadores a seguir por ese camino ante la sensaci¨®n de que sus acciones les salen casi gratis.

Jueces cuestionados

Algunos sindicatos de la Ertzaintza (polic¨ªa aut¨®noma vasca) han dado un paso m¨¢s y han cuestionado, incluso, la capacidad de los jueces vascos para dictar sentencias libre mente bajo el condicionamiento del miedo.En medios gubernamentales y judiciales del Pa¨ªs Vasco se admite que la recurrente pol¨¦mica sobre hechos de vandalismo callejero con resultados muy llamativos -un caso similarse produjo con la sentencia dictada por la Audiencia de Bilbao por la paliza al ertzaina Ander Susaeta durante las fiestas de Bilbao de 1993- y la eterna disyuntiva entre sentencias justas y sentencias ejemplarizantes no facilita la persecuci¨®n de este tipo de delitos.

Lo cierto es que desde que el entorno pol¨ªtico de ETA -Jarrai, Herri Batasuna (HB) y otras organizaciones- intensific¨® el frente callejero en los primeros meses de 1995, los delitos relacionados con alterca dos y disturbios se han disparado. Seg¨²n un informe oficial presentado por la Consejer¨ªa del Interior ante la Comisi¨®n Vas-ca de Seguridad en marzo de este a?o, el n¨²mero de sabotajes (actos de destrucci¨®n planificados) ha pasado de 243 en 1994 a 581 en 1995.

Los objetivos m¨¢s habituales son la Ertzairitza (patrullas o coches privados) y las sucursales bancarias. Los datos de incidentes, es decir, actos dedestrucci¨®n vinculados a manifestaciones o protestas, han crecido tambi¨¦n, al pasar en el mismo periodo de 138 a 308. S¨®lo en 1995, la Ertzaintza detuvo a 648 personas acusadas de delitos corno atentados contra agentes de la autoridad, des¨®rdenes p¨²blicos, insultos, lesiones y otros relacionadoscon la violencia callejera, seg¨²n datos oficiales.

El viceconsejero de Justicia del Ejecutivo aut¨®nomo, el socialista lhaki S¨¢nchez, ante la magnitud de los datos, admite que en el peloteo de responsabilidades entre instituciones, los jueces, pero tambi¨¦n la polic¨ªa -con algunas actuaciones bastante pol¨¦micas, como las intervenciones en las contramanifestaciones de HB frente a las concentraciones pacifistas-, se llevan la peor parte.

"El fen¨®meno de la violencia callejera, las contramanifestaciones, nos sorprendi¨® a todos y la virulencia con la que los hemos vivido desde 1995 ha generado una sensaci¨®n entre los ciudadanos de impunidad y de impotencia que ha finalizado en un linchamiento moral de la justicia", indica S¨¢nchez.

Para contrarrestar la imagen de inoperancia, la Consejer¨ªa de Justicia ha recopilado datos sobre la actuaci¨®n de los tribunales ante estos hechos. "Los fiscales han presentado m¨¢s de 200 escritos de acusaci¨®n por estos delitos en Vizcaya, algo menos en Alava y m¨¢s de 300 en Guip¨²zcoa. Para los pr¨®ximos a?os, ser¨¢n m¨¢s de 700 los juicios que se celebren por estos hechos", estima el viceconsejero.

Juicios en marcha

Los juicios, de hecho, se est¨¢n realizando ya. En lo que va de a?o, en Guip¨²zcoa, la provincia m¨¢s afectada por la violencia callejera, se han celebrado ya 31 juicios, con 57 acusados. De las resoluciones, 27 han sido condenatorias y cuatro absolutorias. S¨¢nchez admite que las penas suelen ser menores. La mayor¨ªa, en torno a seis meses, aunque tambi¨¦n hay algunas de un a?o y hasta de dos, por lo que los j¨®venes no llegan a entrar en prisi¨®n.El viceconsejero de Justicia no cree en la necesidad de penas abultadas ni de reformar el C¨®digo Penal para cargar de a?os este tipo de delitos. "Ni m¨¢s delitos ni m¨¢s penas", afirma. "l_as reformas tendr¨ªan que ir m¨¢s dirigidas a actualizar la Ley de Enjuiciamiento Criminal para generalizar los juicio r¨¢pidos de estos delitos, que no son complejos',.

En ?lava, la menor acumulaci¨®n de casos ha permitido que delitos de este tipo tengan su correspondiente respuesta penal a pocos meses de producidos los hechos, eso s¨ª, la mayor¨ªa con penas bajas. Pero el viceconsejero S¨¢nchez cree necesario "desterrar la idea de que estas conductas les salen gratis a los alborotadores, porque si vuelven a delinquir tendr¨¢n antecedentes e ir¨¢ a prisi¨®n".