Arafat pide que no se ampl¨ªen los asentamientos
Mientras Benjam¨ªn Netanyahu trazaba un id¨ªlico panorama para los vecinos de Oriente Pr¨®ximo durante su visita rel¨¢mpago a Jordania, los palestinos presentaron un cuadro nada halagador para el futuro de sus negociaciones con el Estado hebreo. La reciente decisi¨®n del Gobierno derechista israel¨ª de anular formalmente todas las limitaciones para la expansi¨®n de los asentamientos jud¨ªos en Gaza y Cisjordania amenaza seriamente la fluidez del proceso.En una carta a Netanyahu, el presidente palestino, Yasir Arafat, pidi¨® al Gobierno israel¨ª que mantuviera la congelaci¨®n de nuevas edificaciones en las colonias jud¨ªas decretada en 1992 por los laboristas, entonces en el poder. El texto de la carta no fue difundido, pero fuentes palestinas dijeron que Arafat "invoc¨® el esp¨ªritu de los acuerdos de Oslo y aleg¨® que los compromisos deben ser respetados".
Lo malo para los palestinos es que durante la campa?a electoral que le llev¨® al poder en mayo pasado, Netanyahu precisamente prometi¨® a los colonos jud¨ªos que eliminar¨ªa todos los obst¨¢culos para la ampliaci¨®n de su presencia en Gaza y Cisjordania. En ese sentido, Netanyahu va a cumplir con su palabra a¨²n a riesgo de enturbiar m¨¢s sus relaciones con la Autoridad Nacional Palestina (ANP).
En Jerusal¨¦n se da por hecho que la carta de Arafat ir¨¢ a parar a la papelera y que el l¨ªder palestino va a tener nuevamente que resignarse. Arafat, al menos en el futuro inmediato, no tendr¨¢ siquiera ocasi¨®n de quejarse directamente al primer ministro israel¨ª. Netanyahu, que ya se ha reunido con los jefes de Estado de Egipto y Jordania, se niega a tener un contacto directo con Arafat, a quien muchos de los ministros del Gabinete del Likud describen como un "criminal de guerra" y un "terrorista".
Aislado, ignorado y menospreciado, Arafat tratar¨¢ de hacer oir su voz hoy durante una sesi¨®n del Parlamento palestino en la vecina localidad cisjordana de Ramala. La cuesti¨®n de los asentamientos, sin embargo, puede quedar eclipsada por el igualmente candente tema de la incipiente insurrecci¨®n palestina contra la pol¨ªtica represiva de la polic¨ªa de Arafat en las ciudades de Nabl¨²s y Tulkarem.
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