Clinton hace campa?a con la firma de leyes sociales

El martes, Bill Clinton firm¨® una ley que aumenta el salario m¨ªnimo de los trabajadores. Ayer, firm¨® otra que modifica la asistencia sanitaria. Y ma?ana tiene previsto firmar la m¨¢s ambiciosa y pol¨¦mica de todas: la reforma de las ayudas p¨²blicas a los pobres, lo que se conoce en ingl¨¦s como welfare. A diferencia de su rival, el presidente tiene la posibilidad de hacer campa?a electoral de esta forma, con leyes, no con promesas.Ninguna de esas leyes, con excepci¨®n relativa de la primera, constituye un ¨¦xito personal Clinton. Pero el presidente tiene la potestad de firmarlas y, por tanto, de intentar sacarle el rendimiento pol¨ªtico electoral que esas leyes tienen.El aumento del salario m¨ªnimo hab¨ªa sido un objetivo de Clinton desde hac¨ªa tiempo. Pero el Congreso, controlado por los republicanos, se lo impidi¨® en el pasado, y s¨®lo lo ha aceptado ahora a cambio de un incremento m¨¢s peque?o (90 centavos la hora) y de una compensaci¨®n en recortes de impuestos para los empresarios.

La ley sobre la sanidad es una versi¨®n distinta de la que ambiciosamente present¨® Clinton y defendi¨® su esposa, Hillary, en los primeros a?os de su mandato. La ley firmada ayer no es el proyecto de salud para todos que promet¨ªa Clinton. Lleva la firma de la senadora republicana Nancy Kassebaum y del senador dem¨®crata Edward Kennedy, y se limita a tomar medidas con el fin de evitar que pierdan su seguro de salud los trabajadores que se quedan temporalmente sin empleo.

El portavoz de la Casa Blanca, Michael McCurry, reconoci¨® que el proyecto Kassebaum-Kennedy "est¨¢ bien, pero queda mucho m¨¢s por hacer".

Reforma del 'welfare'

La ley sobre la reforma del welfare es la que m¨¢s profundamente afecta a la sociedad norteamericana. Esa legislaci¨®n acaba con numerosos programas de ayuda a los pobres y reduce dr¨¢sticamente otros. Fue elaborada y defendida por los republicanos en el Congreso, y Clinton, que vet¨® varias versiones anteriores, se ha contentado con conseguir un texto m¨¢s suave que el original.Con la firma de la ley sobre el welfare, el presidente Clinton cumple su promesa electoral de 1992 de reformar ese sistema tal y como se conoc¨ªa. Pero el contenido de esa reforma est¨¢ lejos de las intenciones iniciales del presidente.

Pese a todo, con este marat¨®n de firmas, Clinton consigue ofrecer una imagen de actividad y de dinamismo. El presidente puede as¨ª acudir a la convenci¨®n de su partido con cierta obra a sus espaldas y sacar mayor rendimiento de lo que debe ser la semana grande de los dem¨®cratas.