La dimisi¨®n de su asesor electoral por un l¨ªo de faldas empa?a la gran noche de Clinton en Chicago

El paseo de Bill Clinton hacia la reelecci¨®n se vio ayer entorpecido por un nuevo esc¨¢ndalo sexual en su entorno. Dick Morris, su principal asesor pol¨ªtico y el arquitecto de la transformaci¨®n del presidente norteamericano en un l¨ªder popular y victorioso, present¨® su dimisi¨®n al conocerse que hab¨ªa estado confesando secretos a una prostituta de 200 d¨®lares la hora (25.000 pesetas) con la que ten¨ªa relaciones desde hac¨ªa meses. La noticia, que caus¨® conmoci¨®n, en la convenci¨®n que el Partido Dem¨®crata celebra en Chicago, oscureci¨® el impacto del discurso que Clinton ten¨ªa previsto pronunciar la pasada madrugada en la clausura de la reuni¨®n del partido, tras su proclamaci¨®n un¨¢nime como candidato a la Casa Blanca.

La ca¨ªda de Morris por una circunstancia como la revelada es uno de los peores fiascos que pod¨ªa imaginar Clinton, que hab¨ªa puesto en las manos de ese controvertido personaje todo el peso de esta campa?a electoral, en contra de la opini¨®n de otros altos funcionarios de la Casa Blanca y de destacados dirigentes del Partido Dem¨®crata.A¨²n sin aceptar las acusaciones hechas contra ¨¦l, Dick Morris hizo p¨²blico ayer un comunicado en el que anunciaba su dimisi¨®n para no convertirse en objeto de pol¨¦mica pol¨ªtica cuando faltan poco m¨¢s de dos meses para las elecciones del 5 de noviembre: "Mientras estuve en m¨ª cargo intent¨¦ mantenerme en un segundo plano, porque no quer¨ªa convertirme yo en el mensaje. Ahora renuncio porque no quiero convertirme en el tema de discusi¨®n". Clinton, que acept¨® la dimisi¨®n, declar¨®: "Morris es mi amigo y un gran estratega pol¨ªtico. Le estoy muy agradecido por los dos a?os que ha trabajo a mi servicio".

Morris hab¨ªa contado a una prostituta, seg¨²n public¨® el semanario sensacionalista Star y recogi¨® ayer The New York Post, detalles secretos sobre su labor en la Casa Blanca. Le hab¨ªa permitido escuchar conversaciones privadas con el presidente y le hab¨ªa le¨ªdo discursos que iban a ser posteriormente le¨ªdos en la Convenci¨®n Dem¨®crata. El Post asegur¨® que los datos conocidos forman parte de un diario que la prostituta hab¨ªa escrito desde que entr¨® en contacto con Morris.

Revelaci¨®n sobre Marte

Seg¨²n el diario, la mujer cont¨® que el asesor de Clinton le hab¨ªa anticipado "una noticia que s¨®lo sab¨ªan siete personas en el mundo", y que result¨® ser el descubrimiento de posible vida, en Marte. En sus conversaciones, de acuerdo a las mismas fuentes, Morris se refer¨ªa al presidente como "el monstruo" y a la primera dama, Hillary Clinton, como "el hurac¨¢n". The New York Post afirma que Morris se reun¨ªa con la prostituta, de 37 a?os y de apellido Rowlands, en el hotel Jefferson de Washington cuando el pol¨ªtico se desplazaba a esta capital desde su residencia habitual en el Estado de Connecticut, cerca de Nueva York, donde vive con su esposa.La dimisi¨®n de Morris es un inesperado rev¨¦s para Clinton, justo cuando difrutaba de una c¨®moda ventaja en las encuestas sobre su rival republicano, Bob Dole, y precisamente cuando esta campa?a empezaba a parecer decantada en favor del presidente. Y le afecta en su tal¨®n de Aquiles: la credibilidad.

Anoche, en la convenci¨®n dem¨®crata, algunos delegados no ocultaban su decepci¨®n, pero confiaban en que Clinton sabr¨¢ salir del aprieto. "Es un simple golpe en el camino", declar¨® la senadora por California Dianne Feinstein. La conmoci¨®n contrastaba con el j¨²bilo en el bando republicano. Un portavoz de Dole pronostic¨® que las malas artes van a ser parte de la campa?a a partir de ahora.

Clinton desea que los norteamericanos le reelijan para dirigir al pa¨ªs al siglo XXI, informa Jos¨¦ Manuel Calvo desde Chicago. Para ello, en su discurso de aceptaci¨®n de la pasada madrugada -despu¨¦s de haber sido el primer presidente dem¨®crata designado por unanimidad desde

1936- y en un ambiente de arrolladora euforia, quiso presentar su visi¨®n del futuro, recordar sus logros, ofrecer medidas de alivio fiscal -con la novedad de una importante exenci¨®n para los que venden su casa- y hacer propuestas concretas de creaci¨®n de empleo, transformaci¨®n de las ayudas sociales, educaci¨®n y medio ambiente. Medidas pensadas para contrarrestar las ofertas fiscales de Dole.

Clinton quiso que su intervenci¨®n, que coron¨® una convenci¨®n de la que los dem¨®cratas salen unidos y con la moral por las nubes, coincidiera con los resultados de nuevos sondeos de opini¨®n que devuelven al presidente una notable ventaja sobre Dole. Su discurso iba a girar sobre tres ejes: econom¨ªa, calidad de vida y futuro. Los ¨¦xitos de su Gobierno en el recorte del d¨¦ficit, la creaci¨®n de puestos de trabajo y la marcha de la econom¨ªa unidos a las medidas tomadas para mejorar la vida de los norteamericanos permiten elaborar unos planes para los pr¨®ximos cuatro a?os que contrastaban con el lastre del pasado asociado a Dole.