Juegos Paral¨ªmpicos

Espa?a, en algunas cosas, se ha convertido en un ejemplo para el mundo, como es el caso de la ONCE. Esta organizaci¨®n, creada en 1938, que ha ido evolucionando y moderniz¨¢ndose, est¨¢ cumpliendo una gran labor: primero en el apoyo e integraci¨®n de los ciegos, y ahora en el de los discapacitados. Claro que hay que evitar que la politiquer¨ªa, el partidismo, la corrupci¨®n, la falta de democratizaci¨®n afecten a esta organizaci¨®n (y a otras), que sus medios se destinen a fines diferentes a los previstos. Pero es innegable un gran ¨¦xito, su gran labor, su desarrollo en m¨²ltiples campos: la integraci¨®n de los discapacitados, la importante investigaci¨®n en los campos que afectan a ¨¦stos, su integraci¨®n humana, laboral, educativa, cultural, deportiva, art¨ªstica...Espa?a, gracias a la ONCE, a ocupado la quinta posici¨®n entre 125 pa¨ªses en los Juegos Paral¨ªmpicos con m¨¢s de 100 medallas (39 de oro, s¨®lo a 7 de diferencia de Estados Unidos, el primer clasificado). Lo cual merece todos los reconocimientos. El que personas con graves carencias f¨ªsicas puedan encontrar espacios de participaci¨®n, integraci¨®n, superaci¨®n... es un m¨¦rito infinitamente superior al de los profesionales ol¨ªmpicos que cobran millones de pesetas-