El Ej¨¦rcito se despliega en las zonas atacadas por la nueva guerrilla

El Gobierno mexicano mantiene en estado de alerta a los cuerpos de seguridad tras la ofensiva lanzada el mi¨¦rcoles por el Ej¨¦rcito Popular Revolucionario (EPR) en siete Estados del pa¨ªs, que se cobr¨® 14 vidas. Las Fuerzas Armadas han lanzado un vasto despliegue en las zonas afectadas, mientras la vigilancia se refuerza sobre todo en la capital. Pese a ello, el EPR parece decidido a mantener su macabra presencia: 50 hombres armados atacaron el viernes a un convoy militar en Michoac¨¢n. Un soldado muri¨® y otros dos resultaron heridos.

Sobrevuelos de helic¨®pteros, patrullajes de tanquetas, retenes en carreteras... El esquema se repite en las ¨¢reas calientes, especialmente en las zonas monta?osas de Oaxaca, Guerrero, Estado de M¨¦xico, Puebla y la Huasteca, un territorio compartido por Hidalgo, San Luis Potos¨ª y Veracruz. Los soldados buscan a veces "subversivos y campos de adiestramiento". En otras ocasiones su presencia es disuasoria. La vigilancia, coordinada con los cuerpos policiales, se ha incrementado en Chiapas, Tabasco y Guanajuato, otros de los Estados donde el EPR dej¨® el mi¨¦rcoles su huella.La situaci¨®n de alerta se ha extendido pr¨¢cticamente a todo el pa¨ªs. Los complejos petroqu¨ªmicos, las centrales el¨¦ctricas y determinados aeropuertos est¨¢n ahora especialmente vigilados.Las medidas de seguridad se han extremado en la capital mexicana, donde hoy el presidente Ernesto Zedillo presentar¨¢ su segundo informe de Gobierno. Unos 20.000 agentes participar¨¢n en el dispositivo en tomo al Palacio Legislativo, lugar del acto. Otros 60.000 est¨¢n acuartelados.

A pesar del amplio despliegue de las fuerzas de seguridad, el EPR no ha dudado en proseguir su sangrienta gira veraniega. El viernes por la ma?ana, cuando el Gobierno apenas conclu¨ªa el balance oficial de los ataques de la noche anterior, el grupo armado volvi¨® a golpear, esta vez en el Estado suroccidental de Michoac¨¢n. Una columna de unos cincuenta hombres vestidos de uniforme y con fusiles AK-47 abri¨® fuego contra, un convoy militar en la localidad de Tac¨¢mbaro. Un soldado muri¨® y otros dos resultaron heridos.

La estrategia empleada por el EPR, consistente en breves ataques y emboscadas, mantiene. a las autoridades sobre ascuas. Los responsables de seguridad calculan que al menos 200 individuos bien armados tomaron parte en los operativos del mi¨¦rcoles. Un grupo de unos cincuenta constituir¨ªa un comando m¨®vil.

[Al menos 15 presuntos miembros del EPR han sido detenidos, seg¨²n informaron ayer fuentes oficiales. A los detenidos podr¨ªan sumarse otras 41 personas "convocadas" ayer por el fiscal general de la Rep¨²blica para ser interrogadas sobre las actividades del EPR, informa la agencia France Presse.]

Lo que parec¨ªa una demostraci¨®n de fuerza frente a unas autoridades empe?adas en restar importancia a este nuevo grupo armado toma ahora todo el car¨¢cter de ofensiva general contra el Gobierno.

Un portavoz gubernamental sali¨® ayer al paso de las sospechas de que haya grupos pol¨ªticos detr¨¢s del Ej¨¦rcito Popular Revolucionario. "No hay indicios", dijo. Pero la sensaci¨®n generalizada es que, si se buscan, lo m¨¢s probable es que se encuentren.

Por lo pronto, las voces que piden mano dura ya se empiezan a alzar entre la c¨²pula empresarial y en algunos sectores militares, que han pedido la suspensi¨®n de las garant¨ªas individuales en las zonas calientes. Zedillo asegur¨® en televisi¨®n, sin embargo, que "el Gobierno no cometer¨¢ el error de atropellar los derechos de terceros" y dar as¨ª al EPR la "base social" de la que carece.