"Nada va a alterar el rumbo que ha escogido Aznar"
Tiene apilados los papeles en varias mesas en una especie de desorden ordenado. Y mantiene, a pocos d¨ªas de cumplir 49 a?os, una actitud expeditiva que mezcla el mando, la vehemencia, el genio y un subterr¨¢neo sentido del humor.
Pregunta. Usted dec¨ªa hace tres meses que est¨¦ Gobierno estaba a salvo de "galernas desatadas por quienes tienen cuentas pendientes con la Justicia". Despu¨¦s de la andanada contra el ministro de Defensa, Eduardo Serra, ?sigue pensando lo mismo?
Respuesta. Exactamente lo mismo.
P. ?Est¨¢ convencido de que son totalmente falsas las acusaciones de que Serra pag¨® comisiones ilegales a Luis Rold¨¢n o incurri¨® en otro tipo de corruptelas?
R. De lo que estoy completamente seguro es de que de lo publicado no se desprende ninguna responsabilidad que afecte a la confianza que merece Eduardo Serra, que se basa en toda una trayectoria, en un historial profesional y pol¨ªtico.
P. ?Sigue contando Serra con la misma confianza que el d¨ªa que fue nombrado ministro?
R. Con la misma confianza. Ning¨²n dato, e insisto en lo de dato, de los que se han publicado permite resquebrajar esa confianza. Ninguna informaci¨®n pone en entredicho la afirmaci¨®n de Eduardo Serra de que a partir de 1991, cuando asumi¨® la presidencia de la empresa [Cubiertas y MZOV], no se pagaron comisiones. Yo creo que no existe un riesgo de desestabilizaci¨®n y, desde luego, me niego a plantear una retirada de confianza que no est¨¦ justificada por datos veraces y contrastados.
P. Si todo es falso, ?qu¨¦ ha llevado a que lo publique un diario?
R. Los peri¨®dicos buscan vender m¨¢s ejemplares y, a veces, en la pol¨ªtica informativa hay lo que se llama sensacionalismo, que consiste en inflar una determinada informaci¨®n para inducir a unas conclusiones que puedan interesar en mayor medida a los lectores o afectar a la confianza de la opini¨®n p¨²blica en un ministro. El director de un peri¨®dico lo que busca es tener m¨¢s ¨¦xito, m¨¢s lectores y mejor cuenta de resultados.
P. El director del peri¨®dico [El Mundo] que ha publicado esas informaciones escribi¨® un libro titulado David contra Goliat. Quien present¨® ese libro, se fotografi¨® con su autor en Semana Santa y ha compartido con ¨¦l pareja de padel, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, ?va a convertirse ahora en el Goliat de quien sue?a con seguir interpretando el papel de David?
R. Yo no s¨¦, desde la perspectiva del autor de ese libro, qui¨¦n es el futuro Goliat o el futuro David. Lo que s¨¦ es que, desde la perspectiva de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, que es con la que yo sintonizo, el grado de cr¨ªtica o de coincidencia sobre las decisiones del Gobierno no va a modificar el talante ni a alterar el rumbo que ha elegido para sacar adelante este proyecto pol¨ªtico.
P. Los jueces Baltasar Garz¨®n y Javier G¨®mez de Lia?o les han acusado en sendos autos de "entorpecer" la investigaci¨®n judicial sobre los GAL. Adem¨¢s de algunos fiscales de la Audiencia Nacional, ?tambi¨¦n se rebelan contra el Gobierno los jueces estrella?
R. Por coherencia con la independencia entre poderes, no voy a entrar en la valoraci¨®n de los autos de los jueces...
P. ...Que s¨ª entran a valorar decisiones del Gobierno.
R. Esos autos valoran actos del Gobierno.P. Y eso lo encajan con normalidad.
R. Encajarlo sin comentarios, desde luego. Ahora bien, tan malo es enterrar a Montesquieu desde el Gobierno como intentarlo desde el poder judicial. El resultado para la democracia es el mismo. El Gobierno ha cumplido la ley y me gustar¨ªa que ?todos!, sin excepci¨®n, en sus actos cumplan las leyes.
P. ?Pero cu¨¢l es su reacci¨®n, como Gobierno, cuando lee que en un auto un juez discute al Consejo de Ministros porque le replica que datos referidos a dos ex agentes del Cesid no pueden "afectar materialmente" a la seguridad del Estado?
R. Mi posici¨®n como Gobierno no aconseja una reacci¨®n de entrar al trapo. En todo caso, si alguien tuviera que reaccionar, tendr¨ªa que ser el Consejo General del Poder Judicial.
P. ?Quiere este Gobierno que el Consejo del Poder Judicial sea m¨¢s activo ante posibles extralimitaciones de ciertos jueces?
R. No. Este Gobierno lo que quiere es que se ejerza con plenitud tanto la soberan¨ªa del Consejo del Poder Judicial como las responsabilidades que ello impone.P. ?No es una muestra sonrojante de poca seriedad y de no hacer bien las cosas el aprobar en el Consejo de Ministros la Ley de Secretos Oficiales y siete d¨ªas despu¨¦s, como consecuencia del aluvi¨®n de cr¨ªticas, reconocer la conveniencia de su modificaci¨®n?
R. No. Es una muestra patente de la voluntad de sinton¨ªa con la opini¨®n p¨²blica y la prueba patente de que la etapa del rodillo se ha terminado.
P. ?Han pensado en rebajar el plazo de 50 a?os para que sea levantado el car¨¢cter secreto sobre un asunto?
R. Ese plazo no era imperativo, sino una cl¨¢usula de garant¨ªa. Si la autoridad encargada de la clasificaci¨®n no establec¨ªa un periodo de vigencia, la desclasificaci¨®n era autom¨¢tica a los 50 a?os. Si suprimimos esto, la ley no cambia.
P. ?Y van a mantener las sanciones administrativas a los medios de comunicaci¨®n por publicar un secreto?
R. Si la ley se lee exclusivamente desde la perspectiva de la libertad de informaci¨®n y se hace abstracci¨®n de la defensa de la seguridad nacional, se entra en una lectura incorrecta. Si se quiere establecer un r¨¦gimen sancionador sobre las personas jur¨ªdicas, tiene que haber un apartado de infracciones a ministrativas porque por v¨ªa penal no son sancionables. Pero, como no hay voluntad de hacer una ley-mordaza, haremos las rectificaciones que permitan que la ley se perfeccione y est¨¦ al servicio de una sociedad de libertades donde los ciudadanos se sientan m¨¢s seguros.
P. La seguridad, est¨¢ relacionada con el control, en este caso sobre la discrecionalidad que el Gobierno tiene en sus manos. ?Han pensado en regular alguna intervenci¨®n judicial en la desclasificaci¨®n de los secretos?
R. No descarto ninguna f¨®rmula. La competencia de decidir qu¨¦ es lo que afecta y qu¨¦ es lo que no afecta a la seguridad nacional seguir¨¢ siendo una competencia del Gobierno. Hay ya un mecanismo de resoluci¨®n de los conflictos jurisdiccionales cuya modificaci¨®n nadie ha reclamado. Yo no s¨¦ si adem¨¢s puede ser necesario alg¨²n otro control jurisdiccional de los actos del Ejecutivo en casos de colisi¨®n de intereses. No quiero descartar ninguna f¨®rmula de perfeccionamiento de esta ley.
P. Ustedes, antes, comparaban al PSOE con el PRI como una similitud que resultaba ominosa. Ahora se sientan con un relevante miembro de ese partido mexicano y due?o de Televisa para cerrar acuerdos con RTVE.
R. Est¨¢bamos haciendo una comparaci¨®n con un modelo de partido. No est¨¢bamos cuestionando posibles relaciones de colaboraci¨®n con empresas y sociedades del Estado de M¨¦xico.
P. ?Por qu¨¦ un Gobierno que se llama liberal, que habl¨® de redimensionar RTVE e incluso de privatizar una parte de TVE, quiere convertir ahora a esa empresa p¨²blica en una locomotora
que trata de arrastrar a cadenas privadas en una estrategia de competencia dentro del sector privado?
R. Porque cada uno puede elegir las estrategias de apertura que le parezcan m¨¢s convenientes.
P. Pero ustedes convirtieron n bandera la reducci¨®n de la presencia de empresas p¨²blicas y est¨¢n llevando adelante en diversos sectores mientras que a TVE la quieren convertir en una especie de transatl¨¢ntico.
R. Nunca hemos descalificado la competencia del sector p¨²blico y del sector privado. Lo que hemos dicho es que, cuando haya concurrencia, debe quedar saIvaguardada la igualdad de oportunidades. Hemos aceptado presencia del sector p¨²blico, con m¨¢s o menos amplitud... pero el modelo de televisi¨®n p¨²blica que se ha hecho en Espa?a ni se justifica desde el punto de vista de servicio p¨²blico ni es ostenible en t¨¦rminos econ¨®micos. Es un modelo que m¨¢s tarde m¨¢s temprano conduce a la quiera, salvo que los contribuyentes esten todos los a?os dispuestos a pagar por un producto que pueden obtener por otras v¨ªas y un cargo a sus impuestos. Dadas las imitaciones para flotar econ¨®micamente a RTVE y los l¨ªmites del Prepuesto del Estado para ajustarnos a los requisitos de Maastricht, se ha escogido un camino apertura en el que puedan incidir RTVE y las empresas privadas que quieran estar.
P. Est¨¢n empezando a probar con Julio Anguita la desmesura a la que el l¨ªder de Izquierda unida lleg¨® con los socialistas y que a ustedes les regociajaba entonces porque les favorec¨ªa electoralmente?
R. Los puntos de vista ideol¨®gicos y pol¨ªticos del se?or Anguiat son tan distintos y est¨¢n tan alejados de los del Partido Popurlar que su cr¨ªtica, siendo pol¨ªticamente respetable, no causa ning¨²n tipo de deterioro ni afecta esencialmente a la estabilidad de te Gobierno.
P. Son descalificados por Anguita. Pero no tienen inconveniente en pactar con Izquierda Unida y Comisiones Obreras si con ello consiguen colocar a un amigo del presidente del Gobierno Miguel Blesa, en la presidende Caja Madrid.
R. A m¨ª me parece normal y natural que, cuando se discute la gesti¨®n de una Caja de Ahorros, por ejemplo, las distancias ideol¨®gicas se conviertan en insignificantes y prevalezcan los criterios de afinidad en la gesti¨®n.
P. Afinidad que no exist¨ªa hace s¨®lo unos meses y que parece haber sido precipitada por el deseo de que ocupara ¨¦se puesto ese amigo de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar.
R. ?sa es la etiqueta com¨²n, el amiguismo, que est¨¢ poniendo el Partido Socialista cuando no tiene otra cr¨ªtica que hacer. Detr¨¢s de esa decisi¨®n tomada no ha habido el deseo de cambio de una persona por otra, sino la sustituci¨®n de una manera por otra de entender la pol¨ªtica de las Cajas de Ahorro. Y, respecto a lo que es un nombramiento, ?tienen que quedar excluidas todas las personas conocidas de quien va a efectuar una designaci¨®n? Supongo que para depositar la confianza en una persona habr¨¢ que conocerla antes.P. Usted previno de que, "si alguien busca enchufe con Aznar, lo que conseguir¨¢ ser¨¢ electrocutarse". Lo que no advirti¨® tambi¨¦n es que alguien podr¨ªa quedar paralizado cuando ustedes decidieran desenchufarle, como ha ocurrido en Catalu?a con Aleix Vidal-Quadras.
R. No, no. Al se?or Vidal-Quadras no se le ha desenchufado. Nadie podr¨¢ acusar a la direcci¨®n del PP de provocar la desconexi¨®n de Vidal-Quadras de la estrategia nacional y catalana del PP.
P. Pero a ustedes quiz¨¢ les consta que muchos de sus votantes en Catalu?a piensan como Vidal-Quadras. ?Cu¨¢l ha sido su error? ?Poner en peligro el apoyo que el Gobierno necesita de CiU?
R. No voy a hacer consideraciones sobre el pasado. Lo que me interesa resaltar es que siempre hemos tenido una estrategia de alianzas y que, despu¨¦s del 3 de marzo, qued¨® coronada con unos pactos escritos y p¨²blicos que vamos a seguir cumpliendo y con los que garantizamos la estabilidad del Gobierno. Es la estrategia que hab¨ªa, que hay y que habr¨¢ mientras siga este equipo. Por tanto, la libertad dentro del partido para aceptar o discrepar de esa estrategia es y va a seguir siendo plena. Pero los equipos que tengan la responsabilidad de desarrollar esa estrategia tienen que creer en ella y confiar en ella. No se puede poner al frente de un barco que va a Canarias a un se?or que quiere ir a Beleares.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Eduardo Serra
- Ministerio de la Presidencia
- Ministerio de Defensa
- Francisco ?lvarez Cascos
- Vicepresidencia Gobierno
- Declaraciones prensa
- Pol¨ªtica nacional
- Gobierno de Espa?a
- Secretos oficiales
- Orden p¨²blico
- VI Legislatura Espa?a
- Seguridad ciudadana
- Seguridad nacional
- Legislaturas pol¨ªticas
- Ministerios
- PP
- Partidos pol¨ªticos
- Defensa
- Gobierno
- Gente
- Legislaci¨®n
- Administraci¨®n Estado
- Justicia
- Pol¨ªtica
- Administraci¨®n p¨²blica