El Alfil cambia de rumbo y se especializa en espect¨¢culos de humor

El Alfil ha cambiado su rumbo, Madrid tiene ya un teatro especializado en humor y todo ha ocurrido a la vez. La sala de la calle del Pez cambia de due?os y de programaci¨®n: el grupo de humor gestual Yllana se har¨¢ cargo del Alfil junto a Carlos Romay, el ¨²nico de los antiguos propietarios que permanece en este teatro.

El pr¨®ximo viernes, cuando suba el tel¨®n del teatro Alfil, comenzar¨¢ una nueva etapa de esta sala, que tanto ha dado que hablar en los ¨²ltimos a?os y que tantas veces ha estado a punto de desaparecer. Cuando no era el Ayuntamiento el que amenazaba con un cierre, se quejaban los vecinos por el ruido o bien hab¨ªa una amenaza de desahucio. Entre las an¨¦cdotas de este teatro se cuenta tambi¨¦n la destituci¨®n de dos concejales (Pedro Ortiz y ?ngel Matanzo). "Cambia la gente pero la sala sigue abierta", declar¨® ayer Carlos Romay.El nuevo equipo ha pensado que los espect¨¢culos de humor tienen en Madrid un p¨²blico capaz de llenar la sala. Es el p¨²blico que, por ejemplo, acude al Festival de Teatro de Humor que se celebra desde hace dos a?os en esta sala y al que siempre ha estado vinculado Yllana. Adem¨¢s, no hay otro teatro en Madrid que se dedique a este tipo de funciones.

"Varnos a ofrecer espect¨¢culos que no se ven en Madrid", dec¨ªa Juan Ramos, de Yllana, uno de los ¨²nicos grupos madrile?os especializado en espect¨¢culos de c¨®micos. Los miembros de esta formaci¨®n aseguran que llegan a la sala como empresarios y que no se trata de tener un teatro para presentar sus propios espect¨¢culos.

El Alfil estrena etapa y nueva filosof¨ªa, aunque Romay prefiere decir que ha sido el p¨²blico el precursor del nuevo rumbo. Los nuevos propietarios se declararon ayer desvinculados de las salas alternativas. "Lo que nos apetece es separarnos de lo que son las salas alternativas", dijo rotundamente un miembro de Yllana. "En su funcionamiento, el Alfil nunca ha sido una sala alternativa", puntualiz¨® Romay.

Se acabaron los problemas con el Ayuntamiento. Y con los vecinos. As¨ª lo asegura la direcci¨®n del Alfil, porque ya no va a haber funciones de cabar¨¦ hasta las tantas de la madrugada. Ni conciertos de rock. "No necesitamos ning¨²n tipo de pompas", afirm¨® Romay. "Los vecinos lo que no soportan es el rock and roll, y eso se va a acabar", a?adi¨®. Los nuevos socios han decido ofrecer una funci¨®n diaria, la de las diez. Los fines de semana habr¨¢ doble funci¨®n, "pero no como las de antes. Esta vez ser¨¢n cantantes con guitarra".

El teatro Alfil, con un aforo de 250 butacas, luce ya una nueva imagen en su interior. Los propietarios esperan optar a las ayudas que concede el Consorcio para la Rehabilitaci¨®n de Teatros. De momento, la nueva aventura la emprenden en solitario, sin ayuda econ¨®mica.

El grupo Los Los con su funci¨®n Pourquoi pas? es el encargado de abrir la nueva fase del Alfil. Se trata de un tr¨ªo formado por un espa?ol, un ingl¨¦s y un italiano que se conocieron durante los Juegos Ol¨ªmpicos de Barcelona. Desde entonces llevan varios premios y actuaciones por todo el mundo. Su humor, tal y como ellos dicen, tiene acidez y tristeza, y se dirige a todo el mundo porque todo el mundo lo entiende..

Despu¨¦s del grupo Los Los llegar¨¢ el espect¨¢culo Peinetas de la compa?¨ªa Peineta Teatro, en el que participa Maribel Ripoll (La Reme del programa Esta noche cruzamos el Mississippi). Le seguir¨¢ Bronte, de Canalla Teatro, un montaje que forma parte del Festival de Oto?o. En noviembre estar¨¢ Trainspotting, de Harry Gibson y terminar¨¢ el a?o el grupo Yllana con su Glub glub.Los Los. Teatro Alfil (Pez, 11, metro Noviciado), del 20 de septiembre al 13 de octubre. De martes a s¨¢bados, a las 22.00; domingos, a las 19.00. Precio: 1.500 pesetas.