Incertidumbre pol¨ªtica en Jap¨®n por el adelanto electoral al 20 de octubre

El primer ministro japon¨¦s, Ryutaro, Hashimoto, convoc¨® ayer elecciones generales para el pr¨®ximo 20 de octubre. Hasta entonces, se abre un per¨ªodo dif¨ªcil, caracterizado por la reestructuraci¨®n de algunos de los principales partidos y, especialmente, por el enorme desinter¨¦s de los ciudadanos por la pol¨ªtica nacional, cargada de casos de corrupci¨®n. Como resultado, se espera que ning¨²n partido alcance la mayor¨ªa absoluta y sea imprescindible la formaci¨®n de una nueva coalici¨®n.

Siete minutos despu¨¦s de inaugurarse la sesi¨®n extraordinaria con la que se reanud¨® la actividad de la Dieta tras el descanso veraniego, los parlamentarios japoneses, de pie y con los brazos levantados, celebraban con tres gritos de banzai ("Viva") la disoluci¨®n de las C¨¢maras y la convocatoria de elecciones."Ha llegado el momento de consultar a la sociedad sobre su confianza en nosotros para guiar a Jap¨®n al futuro", se limit¨® a decir Hashimoto, l¨ªder conservador y primer ministro, tras firmar el decreto.

Si bien se trata de comicios anticipados, dado que la legislatura no expira hasta el pr¨®ximo verano, esta decisi¨®n es considerada por amplios sectores de la sociedad como una asignatura pendiente, puesto que Jap¨®n ha tenido en los ¨²ltimos tres a?os cinco Gobiernos, con participaci¨®n de distintos partidos y alianzas, sin una sola consulta electoral. Estos trasvases de poder pactados entre bastidores han sido la raz¨®n fundamental por la que la mayor¨ªa de la poblaci¨®n manifiesta hoy su desinter¨¦s por la pol¨ªtica nacional y por unos comicios en los que puede participar, tan s¨®lo, el 60% de los electores.

Todos los analistas pol¨ªticos afirman que ninguno de los partidos conseguir¨¢ la mayor¨ªa absoluta, por lo que, tras las elecciones, se abrir¨¢ un tenso per¨ªodo de negociaciones para conseguir un nuevo matrimonio pol¨ªtico de conveniencia como el que gobierna en la actualidad, formado por conservadores y socialistas.

Sondeo

Seg¨²n un sondeo del principal diario econ¨®mico japon¨¦s, Nihon Keizai o Nikke? cerca del 50% de los electores no apoya a ning¨²n partido pol¨ªtico concreto, aunque el 56,7% desea un cambio de Gobierno.Estas elecciones se convocan en un momento de gran confusi¨®n pol¨ªtica, en la que la creaci¨®n de un nuevo-partido, el Dem¨®crata, ha producido una cadena de fugas que ha debilitado a dos de los socios de la actual coalici¨®n: el Partido Socialista y el peque?o grupo conservador Sakigake. Seg¨²n la encuesta del Nikkei, ambos partidos conseguir¨¢n tan s¨®lo un 8% y un 3% de los esca?os, respectivamente.

Por su parte, el principal partido, el Liberal Dem¨®crata, sigue contando con la ventaja de tener a uno de los pocos l¨ªderes carism¨¢ticos del panorama pol¨ªtico, Ryutaro Hashimoto. Sin embargo, la formaci¨®n que gobern¨® ininterrumpidamente durante 38 a?os, hasta 1993, tiene ahora una imagen muy deteriorada por m¨²ltiples casos de corrupci¨®n, por lo que, seg¨²n los sondeos iniciales, podr¨ªan conseguir alrededor del 22% de los votos.

El nuevo Partido Dem¨®crata, que se crear¨¢ hoy, cuenta con dos l¨ªderes j¨®venes y muy populares, especialmente el ministro de Sanidad, Naoto Kan, art¨ªfice de la investigaci¨®n que ha desvelado el esc¨¢ndalo del sida, turbia alianza econ¨®mica entre el sector farmac¨¦utico y- el ministerio que en los a?os ochenta caus¨® el contagio de esta enfermedad a unas 2.000 personas. Pese a no haber presentado todav¨ªa un detallado programa pol¨ªtico, los primeros sondeos de opini¨®n le adjudican una proporci¨®n de voto (del 8%) superior a la del principal partido de la oposici¨®n, el Nueva Frontera (alrededor del 6,5%).

El tema principal del debate electoral ser¨¢ la subida del impuesto sobre el consumo, del actual 3% hasta un 5%, medida enormemente impopular pero considerada por algunos analistas imprescindible para hacer frente a una de las deudas p¨²blicas m¨¢s voluminosas de los pa¨ªses desarrollados.