S¨ªete palestinos y tres israel¨ªes mueren en el tercer d¨ªa de enfrentamiento total
Soldados israel¨ªes mataron ayer a tres palestinos en los alrededores de la mezquita de Al Aqsa, en un nuevo choque que amenaza con extender y prolongar el conflicto a pesar de intensos esfuerzos pol¨ªticos por evitar el colapso total del proceso de paz y el contagio de la crisis a nivel regional. Al menos 30 palestinos resultaron heridos en ese mismo incidente registrado al t¨¦rmino de la oraci¨®n del viernes, que congreg¨® a m¨¢s de 20.000 fieles. En total, siete palestinos y dos militares israel¨ªes perecieron ayer en combates en varios puntos de Cisjordania; un tercer israel¨ª -un coronel- muri¨® en la frontera de Gaza. Ya son 68 los fallecidos en estos tres d¨ªas de enfrentamiento total: 54 palestinos y 14 israel¨ªes, seg¨²n el Estado hebreo.
La tercera jornada de violencia palestino-israel¨ª tras la decisi¨®n del Gobierno del Likud de abrir el pasadizo que discurre bajo los cimientos de la mezquita de Al Aqsa produjo pocas esperanzas de una tregua efectiva entre el primer ministro israel¨ª, Benjam¨ªn Netanyahu, y el presidente palestino Yasir Arafat. Netanyahu culp¨® a Arafat de provocar la violencia al agitar a las masas. Arafat admiti¨® que en estas circunstancias es dif¨ªcil pensar en un arreglo, ya que la cuesti¨®n del t¨²nel tiene profundas ra¨ªces pol¨ªticas y religiosas. Netanyahu, ante cuya casa en Jerusal¨¦n desfilaron anoche centenares de manifestantes israel¨ªes que le ped¨ªan prudencia, dijo que no se sent¨ªa "arrepentido" por abrir el t¨²nel y lanz¨® una severa advertencia a Arafat: "Durante las negociaciones de paz, que no se hable de la opci¨®n de una guerra".
Adoptando s¨²bitamente una posici¨®n ultrapacifista, Arafat declar¨® en Gaza que "el proceso de paz es el ¨²nico camino para poner fin a la violencia, a las matanzas y ataques que estan ocurriendo". Pero refiri¨¦ndose a los incidentes de la mezquita de Al Aqsa, dijo que el comportamiento de los soldados israel¨ªes es algo que "jam¨¢s" aceptar¨¢."?sta es una violaci¨®n de lo que acordamos anoche: hay que calmar la situaci¨®n en Jerusal¨¦n".?se era anoche un objetivo extremadamente ambicioso. A la matanza en la mezquita se sumaron sangrientos incidentes en -el usualmente apacible pueblo cisjordano de Jeric¨®, donde murieron tres palestinos, y en Tulkarem, donde perecieron dos polic¨ªas israel¨ªes y un manifestante palestino. En la franja de Gaza, escenario el jueves de los m¨¢s cruentos combates desde la Intifada, centenares de manifestantes palestinos apedrearon a soldados israel¨ªes que custodian a los colonos jud¨ªos de los asentamientos que todav¨ªa quedan all¨ª. Mientras la "batalla por Jerusal¨¦n", como la denominan muchos palestinos, o "la guerra del t¨²nel", como proponen otros, entra hoy en su cuarto d¨ªa, si algo conviene tener en cuenta es que Israel ni cierra el t¨²nel ni baja la guardia.
El ministro de Defensa, Isaac Mordejai, declar¨® que acabar con los enfrentamientos va a exigir m¨¢s tiempo del previsto. "Hay armas y hay bajas", dijo. El jefe del Ej¨¦rcito reiter¨® que si es necesario, Israel va a utilizar los tanques que ya ha desplegado en CisJordania por primera vez desde la guerra de 1967. El diario Haaretz compar¨® el riesgo que se cierne a la proximidad entre una cerilla encendida y un dep¨®sito de gasolina.
El mensaje que parti¨® de la mezquita de Al Aqsa ayer fue mucho m¨¢s categ¨®rico. Uno de los sermones convoc¨® a la unidad de los palestinos para organizar "la sagrada defensa de Jerusal¨¦n" y la idea fue recibida con estruendosos gritos de "Al¨¢ Akbar [Dios es el m¨¢s grande]".
La intervenci¨®n de los soldados israel¨ªes caus¨® caos primero y p¨¢nico despu¨¦s. "Hab¨ªamos acabado de orar cuando de pronto vimos a los soldados que avanzaban por la puerta principal que da al oeste. Hab¨ªa bastante gente en la fuente de las abluciones que qued¨® s¨²bitamente expuesta al avance de los israel¨ªes", relat¨® un joven palestino. Despu¨¦s comenzaron los disparos.
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