Los fantasmas no faltan a la cita

Cada vez que llega el Rayo a Riazor se despiertan los viejos fantasmas que anoche acudieron un a?o m¨¢s a la cita. Hace ya tres lustros que los vallecanos privaron al Deportivo de un ascenso a Primera anunciado con muchos a?os de antelaci¨®n, y a¨²n est¨¢ m¨¢s reciente -otro punto perdido ante el mismo funesto adversario muy pocos d¨ªas antes que Djukic desperdiciase el penalti m¨¢s c¨¦lebre de la historia de la Liga. Anoche el Rayo tambi¨¦n, fue capaz de apagar el fulgor de los astros blanquiazules y trabaj¨® con fe para seguir cumpliendo con la tradici¨®n. Al Deportivo se le cortan bruscamente tres semanas de euforia.Afrontaba el Deportivo una prueba in¨¦dita esta temporada: v¨¦rselas con un equipo emboscado en el ¨¢rea, dispuesto a defender su suerte hasta la ¨²ltima gota de sudor. Y la f¨®rmula result¨® bastante indigesta para los coru?eses. No es que el Deportivo no hiciera los deberes, ni que fuese incapaz de hallar gateras para colarse en la empalizada del Rayo. Durante la primera parte, Rivaldo fall¨® dos remates solo ante Contreras, y Martins y Nando irrumpieron otro par de veces por los dos flancos del ¨¢rea en acciones destinadas a morir acariciando las redes. Pero las dificultades que le plante¨® el rival terminaron por quebrar la convicci¨®n blanquiazul, que acab¨® la primera parte temiendo seriamente que el Rayo inauguras e el marcador.

Paquito meti¨® cinco hombres atr¨¢s y prescindi¨® de las funciones creativas del medio campo. En poder de los vallecanos, la pelota busc¨® siempre a sus dos delanteros, ambos corpulentos y uno de ellos, Guilherme, con calidad suficiente para navegar en aguas hostiles. En la parte de atr¨¢s, el Rayo estuvo atento y ordenado para deshacer los pases al interior del ¨¢rea. En ataque, se encontr¨® con una defensa deportivista en la que faltaba Djukic, lo que es lo mismo que decir que hab¨ªa problemas para Paco y Naybet, desamparados por la ausencia del cerrojo yugoslavo.

A siete minutos para el descanso, Guilherme acab¨® por acelerar las pulsaciones del respetable con una tremenda vaselina que el guardameta camerun¨¦s, en un alarde tigresco, roz¨® lo justo para lograr que el bal¨®n se fuese a la madera y no adentro. De ah¨ª hasta la hora del recreo, todo fueron sustos para los de Toshack, quien tom¨® medidas en el vestuario para regresar al m¨¦todo tradicional: Donato se fue atr¨¢s para arropar como tercer central a los atribulados Paco y Naybet.

Pero ni as¨ª hall¨® el gal¨¦s la tranquilidad a?orada. Paco acab¨® completando una noche de dislates dej¨¢ndose arrebatar un bal¨®n por KIimowicz al borde del ¨¢rea. Aunque el defensa logr¨® finalmente interponerse cuando el delantero argentino encaraba a Songo'O, el ¨¢rbitro vio cesi¨®n ?legal. En el lanzamiento, Guilherme sac¨® un primoroso disparo a la escuadra de Songo'O. Los coru?eses anduvieron unos cuantos minutos aturdidos hasta que Manjar¨ªn, que hab¨ªa reemplazado a Fran, demostr¨® sus cualidades de ratero. Rob¨® un bal¨®n que trataba de sacar la defensa rayista, esprint¨® y marc¨® antes de forzar el mano a mano con Contreras.