Los terroristas corsos, principales sospechosos tras un atentado con bomba en el Ayuntamiento de Burdeos

Un atentado con bomba devast¨® parcialmente el Ayuntamiento de Burdeos, cuyo alcalde es el primer ministro Alain Jupp¨¦, el s¨¢bado a medianoche. La explosi¨®n no hiri¨® a nadie ni fue reivindicada, pero fuentes de la policia francesa dijeron ayer que las investigaciones se orientaban hacie el terrorismo corso y, concretamente, hacie el Frente de Liberaci¨®n de C¨®rcega (FLNC hist¨®rico). Jupp¨¦, que hab¨ªa trabajado el s¨¢bado en la alcald¨ªa y la hab¨ªa abandonado `pocas horas antes de la explosi¨®n, dijo sentirse "indignado" y "traumatizado", "No nos dejaremos intimidar", proclam¨®.

"El Estado no puede ceder ante el terrorismo". "No nos podemos dejar intimidar", dijo Jupp¨¦ anoche a un programa del primer canal de la televisi¨®n francesa. El primer ministro declin¨®, por el momento, vincular a los terroristas corsos con el atentado. Se limit¨® a decir: "La justicia se ha hecho cargo". Jupp¨¦ defendi¨® una "l¨ªnea extremadamente firme" en lo que se refiere a la autoridad del Estado en la isla de C¨®rcega, "porque el 90% de la poblaci¨®n [corsa] nos apoya".El atentado se produjo a las 23.41 horas, cuando el Rohan, el caser¨®n de piedra donde tiene su sede el ayuntamiento bordel¨¦s, se encontraba totalmente vac¨ªo. Una fuerte carga estall¨® junto a una puerta trasera del edificio y caus¨® graves da?os en la fachada orientada hacia el jard¨ªn. El hist¨®rico sal¨®n de honor result¨® casi totalmente destrozado, y la onda expansiva devast¨® igualmente el mobiliario del despacho de Alain Jupp¨¦. Se desconoce a¨²n el componente -dinamita o explosivo pl¨¢stico- empleado por los terroristas y la cantidad. De confirmarse la autor¨ªa del FLNC hist¨®rico, el atentado de Burdeos marcar¨ªa definitivamente el fin de la relativa tregua mantenida durante los ¨²ltimos meses.

El FLNC hist¨®rico ya hab¨ªa hecho estallar un artefacto en el Palacio de Justicia de Aix-en-Provence, cerca de Marsella, exactamente una semana antes. El atentado de Aix-en-Provence fue reinvindicado el lunes. El martes, los hist¨®ricos emitieron un comunicado en el que afirmaban que el Gobierno de Par¨ªs hab¨ªa "retomado de una forma brutal y despreciativa la cuesti¨®n corsa". "La represi¨®n puesta en pr¨¢ctica no hace sino confirmar la intenci¨®n del Gobierno de dejar pudrir la cuesti¨®n corsa y reducirla a un simple problema de mantenimiento del orden p¨²blico", segu¨ªa el comunicado del FLNC hist¨®rico.

El retorno de las bombas al continente subraya el fracaso de la pol¨ªtica mantenida hasta ahora por el Gobierno de Jupp¨¦ respecto a C¨®rcega. En cuanto el presidente Jacques Chirac form¨® su primer Gobierno, en mayo de 1995, Jupp¨¦ y su ministro del Interior, Jean-Louis Debr¨¦, entablaron discretos contactos con el FLNC hist¨®rico. Para intentar resolver el ya viejo problema del nacionalismo violento corso, Jupp¨¦ apost¨® por negociar con el sector m¨¢s violento y numeroso.

En nombre de la negociaci¨®n, el ministro Debr¨¦ toler¨® incluso que el d¨ªa de su primera visita oficial a la isla, en enero pasado, 600 hist¨®ricos encapuchados y armados hasta los dientes convocaran a la prensa y lanzaran un desaf¨ªo abierto al Ejecutivo delante de las c¨¢maras.

Poco despu¨¦s, el FLNC hist¨®rico decret¨® una tregua unilateral que nunca lleg¨® a ser totalmente efectiva y se limit¨® a circunscribir los atentados a los edificios p¨²blicos de la isla.