Derecho al pataleo

Romper el concierto que las farmacias tienen con la Administraci¨®n al haber variado las condiciones econ¨®micas; empezar a cobrar, por tanto, el precio ¨ªntegro de las recetas de la seguridad social, es hoy por hoy s¨®lo una herramienta en manos de los colegios, advierte el tesorero del colegio de Barcelona, Francesc Pla.Pero la sangre no parece que llegue al r¨ªo en el pleno que hoy celebran en Madrid los responsables colegiales. Joan Gratac¨®s, presidente de los colegios de Catalu?a, resumi¨® en declaraciones a Europa Press el sentir de muchos colegas, al asegurar que las medidas de acci¨®n no ir¨¢n m¨¢s all¨¢ del "derecho al pataleo".

Traer¨¢ consecuencias, eso s¨ª. Juan Ignacio Guenechea, miembro del colegio de Vizcaya, entiende que en adelante "va a ser dif¨ªcil involucrar al farmac¨¦utico en pol¨ªticas de contenci¨®n del gasto". Francesc Pla habla de recortes reales del beneficio en un 15% y siembra la duda sobre los 50.000 empleos que da la farmacia en Espa?a. Entre los colegiados hay disgusto sobre c¨®mo ha negociado el Consejo General, pero culpan al ministerio de la "sorpresa" final. "Nos hace sospechar que era Sanidad quien no quer¨ªa llegar a un acuerdo", sostiene Pla.

Los laboratorios, con lo suyo, tampoco quieren sorpresas. Juan Manuel Reol, de Farmaindustria, advirti¨® ayer en el Congreso que ellos tambi¨¦n podr¨ªan romper su pacto con Sanidad para devolver parte de sus beneficios, seg¨²n y c¨®mo se apliquen los precios de referencia a partir de los gen¨¦ricos.