Roce entre Francia e Israel en v¨ªsperas de la gira de Chirac por Oriente Pr¨®ximo

Jacques Chirac inicia hoy su viaje diplom¨¢tico m¨¢s ambicioso hasta la fecha. El presidente de Francia realizar¨¢ una gira por Oriente Pr¨®ximo con un doble objetivo: reavivar la casi extinguida presencia europea en la regi¨®n y marcar un apoyo claro a la autonom¨ªa palestina. La primera causa le enfrenta con EE UU, mientras la segunda le ha costado ya un serio roce con el Gobierno de Israel. Chirac quer¨ªa enviar a su ministro de Exteriores, Herv¨¦ de Charette, a Jerusal¨¦n Este para celebrar una reuni¨®n con las autoridades palestinas de la ciudad. Benjam¨ªn Netanyahu lo ha impedido.
Chirac alcanz¨® la presidencia con un proyecto diplom¨¢tico muy claro. Francia, en nombre de la Uni¨®n Europea (UE), deb¨ªa convertirse en ¨¢rbitro de la orilla sur del Mediterr¨¢neo y en gendarme del continente africano. Ambas cuestiones enfrentan a Francia con EE UU.
Tanto Washington como Par¨ªs quieren controlar un futuro afroej¨¦rcito con misiones de interposici¨®n y pacificaci¨®n. El secretario de Estado; Warren Christopher, afirm¨® hace exactamente una semana, al t¨¦rmino de una gira africana, que el fin de la guerra fr¨ªa hab¨ªa acabado con las zonas de infuencia exclusiva. El jefe de la diplomacia de Washington proclam¨® que, en adelante, Francia deber¨ªa contar con la presencia de EE UU en un continente en el que, hasta ahora, el Quai d'Orsay hab¨ªa dispuesto de una enorme influencia gracias a la francofon¨ªa y a la zona econ¨®mica del franco.
A partir de hoy, Chirac intentar¨¢ contraatacar con el mismo argumento: ya no existen zonas de exclusividad, ni siquiera Oriente Pr¨®ximo, donde EE UU ejerce una hegemon¨ªa absoluta gracias a una poderosa trama de intereses militares; econ¨®micos y, en el caso de Israel, pol¨ªticos y sentimentales. Bill Clinton advirti¨® que no quer¨ªa "interferencias" europeas en el proceso de paz. Chirac ha decidido erigirse en una gran interferencia.
Ayuda de la UE
La UE es el principal proveedor de fondos de la Autoridad Nacional Palestina. Escudado en esa realidad, Chirac quer¨ªa hacer un doble gesto durante su visita a Israel: ¨¦l, intentar¨ªa ganarse la confianza del Gobierno derechista de Netanyahu, con quien las relaciones son fr¨ªas, mientras su ministro de Exteriores visitar¨ªa Jerusal¨¦n Este para demostrar el apoyo de Francia a la causa palestina.Pero Netanyahu ha rechazado tajantemente una visita de alto nivel a Jerusal¨¦n. Este. Tendr¨¢ que ser un ministro de escaso rango, el secretario de Estado de Salud, Herv¨¦ Gaymard, quien se re¨²na con las autoridades de la OLP en la zona oriental de Jerusal¨¦n. Herv¨¦ de Charette, que acompa?ar¨¢ a Chirac en todo el periplo, no participar¨¢ en la etapa israel¨ª para demostrar el desagrado de la diplomacia francesa ante la intransigencia de Netanyahu. El incidente constituye, en cualquier caso, un mal arranque para la gira presidencial, que incluir¨¢, adem¨¢s de Israel, Siria, L¨ªbano y Egipto
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