Cabez¨®n
Parece que el Gobierno municipal del PP, a instancias de la Asociaci¨®n de Vecinos del distrito Centro, rectifica su decisi¨®n de construir viviendas junto a la bas¨ªlica de San Francisco el Grande. Ser¨ªa una barbaridad, urban¨ªsticamente hablando, meter un bloque de cemento junto al bello templo edificado sobre el solar del convento franciscano de estilo g¨®tico en el que es fama que estuvo san Francisco de As¨ªs durante el viaje que, seg¨²n se dice, hizo a Espa?a.El PP ha demostrado ser un gran rectificador y, por si vuelve a rectificar lo rectificado y su rectificaci¨®n es otro "globo sonda", vale la pena seguir aportando argumentos en contra de su primer proyecto. El solar en el que se pensaba construir viviendas era el claustro del convento antiguo. Y all¨ª fueron enterrados algunos ilustres personajes de la ¨¦poca. Una de las tumbas ten¨ªa el siguiente epitafio, cuya transcripci¨®n me facilita mi amigo, el music¨®logo Andr¨¦s Ruiz Tarazona: "En esta sepultura yace aquel ingenio esclarecido, Anton¨ªo, gloria del primer rango de los organistas. Cabez¨®n, su apellido, ?a qu¨¦ nombrarlo si su noble fama vive en la tierra y en los astros vive? Muri¨®, ay, llor¨¢ndolo la corte del real Felipe entera, tan rara era la joya que ha perdido".
Tanto apreciaba Felipe II a su maestro de capilla que encarg¨® a S¨¢nchez Coello que le retratara. Hay pruebas de que los modernos no han sabido valorar en la misma medida al gran compositor espa?ol que fue maestro en la Europa de su tiempo y cuya m¨²sica podemos escuchar gracias a las grabaciones de Antonio Baciero. Lo sugiere as¨ª una an¨¦cdota que se cuenta de un famoso gobernador civil de Burgos, quien, a comienzos de los a?os setenta, inaugur¨® un peque?o monumento al m¨²sico en su pueblo natal de Castrillo. Despu¨¦s de pronunciar unas palabras, grit¨® el gobernador: "?Antonio de Cabez¨®n! ?Presente!".
Ni siquiera una calle tiene dedicada en Madrid el organista de Felipe II. No estar¨ªa mal que, en ese solar que fue claustro y donde ¨¦l recibi¨® sepultura, se hiciera un jard¨ªn que llevara su nombre.
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