Mitterrand oculto que su primer ministro de Defensa espi¨® para el Este
Una nueva sorpresa emerge de los a?os de Fran?ois Mitterrand Charles Hernu, el primer ministro de Defensa socialista franc¨¦s, hab¨ªa trabajado previamente para los servicios secretos de Bulgaria, Rumania y la Uni¨®n Sovi¨¦tica. El semanario L'Express revela esta semana las actividades de Herhu como informador retribuido, pero deja en el aire una inc¨®gnita: ?se mantuvieron los contactos con el Este despu¨¦s de entrar en el Gobierno? Hernu, ministro entre 1981 y 1985, forzado a dimitir por el atentado contra el Rainbow Warrior de Greenpeace y fallecido en 1.990. Mitterrand, informado en 1992 del caso, lo cerr¨® declar¨¢ndolo secreto de Estado. El caso ha conmocionado a Francia.
El entonces m¨¢ximo responsable de la Direcci¨®n de la Seguridad del Territorio (DST, contraespionaje), Jacques Fournet, acababa de recibir una carpetades de Rumania, donde se desmantelaban los archivos de la Securitate. La carpeta conten¨ªa informes efectuados por Hernu y recibos de cada, pago. Mitterrand qued¨® abrumado. Otro de sus amigos, Pierre-Patrice Pelat, el hombre del Rolls Royce dorado, acababa de verse implicado en un esc¨¢ndalo financiero. "Despu¨¦s de Pelat, Hernu..." suspir¨® Mitterrand. Seg¨²n el relata de L'Express, el presidente se rehizo inmediatamente:- "No reescribiremos la historia. Consid¨¦relo, se?ot director, como un secreto de Estado. El asunto qued¨® enterrado. Jacques Fournet confirmo ayer su entrevista con Mitterrand, pero precis¨® que no exist¨ªa la total seguridad de que los documentos incriminatorios fueran aut¨¦nticos. J¨¦r?me Dupuis y Jean-Marie Pontaut, los autores de la exclusiva de L'Express, replicaron que el antiguo jefe del contraespionaje hab¨ªa verificado la autenticidad del contenido de la carpeta: "No se puede imaginar seriamente que un jefe de los servicios de informaci¨®n vaya a molestar al presidente de la rep¨²blica con documentos que pueden ser falsos y cuyo contenido hunde a uno de sus m¨¢s fieles amigos pol¨ªticos. Eso ser¨ªa un suicidio profesional". Los dos periodistas, han contrastado adem¨¢s, su informaci¨®n con testimonios de los esp¨ªas b¨²lgaros, rumanos, y sovi¨¦ticos que. contactaron con Hernu.
El asunto comenz¨® en 1953. Charles Hernu, hijo de gendarme, encarcelado durante unos meses tras la liberaci¨®n como presunto colaboracionista, mason, mujeriego, inteligente e hiperactivo, ten¨ªa, 29 a?os y formaba parte de los radicales de izquierda que apoyaban a Pierre Mend¨¦s-France. Ra¨ªko Nikolov, tercer secretario de la Embajada de Bulgaria en Par¨ªs y esp¨ªa, trab¨® relaci¨®n con Hernu y le pidi¨® que le enviara notas sobre la Pol¨ªtica francesa. El Joven pol¨ªtico, escaso de dinero, acept¨®. A cambio de una retribuci¨®n que oscilaba entre los 25.000 y los 50.000.francos antiguos (de 70.000 a 140.000 pesetas actuales), Hernu empez¨® a trabaiar para Nikolov bajo el nombre clave de Andr¨¦.En 1956, Hernu, alcanz¨® un esca?o de diputado y los b¨²lgaros mejoraron su sueldo. Pero podo despu¨¦s Nikolov dej¨® su puesto en Par¨ªs y los servicios de Andr¨¦ fueron retomados directamente por Mosc¨², a trav¨¦s de su hombre en Francia, Vlad¨ªmir Ivanovitch Erofeev. En 1958, seg¨²n L'Express, Ia URSS entreg¨®, a Hernu, unos 7,5 millones de pesetas actuales para financiar una campa?a electoral. Ese extremo es desmentido por su hijo quien afirma que ese dinero fue proporcionado por la mujer con quien viv¨ªa entonces Hernu. En 1961, en plena crisis de Argelia, a Hernu, tuvo protecci¨®n policial y cort¨® sus contactos con la embajada sovi¨¦tica. Pero al a?o siguiente entr¨® en la n¨®mina de la Securitate. Ya era uno de los parlamentarios m¨¢s pr¨®ximos a Mitterrand. En 1963 volvi¨® a contactar directamente con el KGB y ah¨ª se corta la,pista. Lo que hizo Hernu desde entonces permanece en el, secreto de alg¨²n archivo ruso. Cuando, 18 a?os m¨¢s tarde, fue nombrado ministro de Defensa del primer Gobierno de Mitterrand Hernu se caracteriz¨® por su proatlantismo y Washington le tuvo por un amigo. ?No intent¨®, Mosc¨² sacarle informaci¨®n bajo la amenaza de revelar su pasado? La pregunta, por el momento, queda en el aire.
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