La educacion el siglo XXI, a debate

"La sociedad no tiene m¨¢s futuro que su educaci¨®n. Ninguna sociedad es superior a sus universidades. En educaci¨®n, la pol¨ªtica debe ser de Estado, y no de partidos". Con estas palabras present¨® Ricardo D¨ªez Hochleitner, presidente del Club de Roma, la XI Semana Monogr¨¢fica Aprender para el futuro, que se celebra desde ayer en Madrid. Jacques De lors, director del informe a la Unesco sobre la educaci¨®n del siglo XXl, dijo que los pilares de la educaci¨®n son "aprender a saber, a ser, a hacer y a vivir juntos". El presidente de la Fundaci¨®n Santillana, Jes¨²s de Polanco, la defini¨® como, el veh¨ªculo para "lograr la plenitud individual y el progreso de todos en paz y en justicia".La ministra de Educaci¨®n y Cultura, Esperanza Aguirre, calific¨® las jornadas de punto de partida para un futuro que pertenece a quienes hoy reciben formaci¨®n. En alusi¨®n al humanista Luis Vives, record¨®: "La tiran¨ªa de la ignorancia es la m¨¢s dura y l¨®brega de las es clavitudes". La ministra tambi¨¦n advirti¨® que "no favorece' la calidad cualquier medida que se aplica al sistema educativo" y que, en ocasiones, se han incluido medidas que disminuyen el nivel de conocimiento.

Creatividad, solidaridad, tolerancia, flexibilidad son algunos de los valores que defiende el encuentro de Madrid -que ,cuenta con m¨¢s de 200 asistentes- como materias permanentes de la educaci¨®n en unos tiempos en los que "existe una transformaci¨®n profunda y rapid¨ªsima que provoca una sensaci¨®n de v¨¦rtigo y de crisis". Ante esta velocidad de cambio, la propuesta de las jornadas a las que presta su hospitalidad la Organizaci¨®n de Estados Iberoamericanos (OEI), apunta hacia la necesidad de una revoluci¨®n global en las relaciones entre los pueblos, del hombre con la naturaleza.

"Aqu¨ª nos reunimos de nuevo", dijo Jes¨²s de Polanco, haciendo referencia a las diez ediciones anteriores, "para reflexionar sobre los principios, las metas y los medios del instrumento m¨¢s eficaz para contribuir a lograr la plenitud individual y el progreso de todos en pPaz y justicia, es decir, la Educaci¨®n". Las oportunidades para ese desafio, que mira ya hacia el siglo XXI y entiende la escuela no solamente como sus aulas sino como un instrumento de filtraci¨®n en todos los caminos de la sociedad, est¨¢n en todas las edades y todos los humanos en una formaci¨®n permanente y continua; flexibilidad y tolerancia, seg¨²n los participantes, deben arrancar el papel protagonista a las f¨®rmulas que han conducido a la desigualdad.

Betancur y el humanismo

"Por encima de las leyes y de las reformas educativas hace falta que la transformaci¨®n se d¨¦ de abajo arriba, desde las aulas", dijo el ministro venezolano de Educaci¨®n, Antonio Luis C¨¢rdenas, tras subrayar c¨®mo los pol¨ªticos no toman en, cuenta las repetidas recomendaciones de organismos internacionales, como el Club de Roma o la UNESCO, en el sentido de transformar la educacion para una convivencia en la igualdad, la justicia y la paz.El hombre "tiene que comprender y conocer el mundo en el que vive", dijo el expresidente de Colombia Belisario Betancur. "En Am¨¦rica Latina est¨¢bamos formando profesionales unipolarizados- que carecian de formaci¨®n human¨ªstica y perd¨ªan capacidad de lenguaje", record¨® Betancur. "En buena hora, nuestras universidades han reaccionado y han introducido de nuevo los elementos human¨ªsticos. En el sur de Estados Unidos est¨¢ ocurriendo lo mismo", a?adi¨®.

En las sesiones, que durar¨¢n toda la semana, se someter¨¢ a debate el informe dirigido a la Unesco por la Comisi¨®n Internacional sobre la educaci¨®n para el siglo XXI presidida por Delors traducido por primera vez al castellano y coeditado con la editorial Santillana. "?sta es una ocasi¨®n especialmente singular y memorable", subray¨® Polanco, "ante la presencia entre nosotros de Jacques Delors. La calidad literaria de su lenguaje debe servir", a?adi¨®, "como nuevo punto de partida e impulso renovador para que todos asumamos por medio de, la Educaci¨®n los desaf¨ªos y las oportunidades que presenta el siglo XXI".