El paradero de Publio Cord¨®n, principal escollo en los contactos

El principal problema surgido durante los numerosos contactos entre representantes de Interior y los GRAPO es el paradero del empresario aragon¨¦s Publio Cord¨®n, secuestrado el 27 de junio de 1995. Su familia pag¨® en Par¨ªs un rescate de 390 millones. Enrique Cuadra Echeand¨ªa, uno de los detenidos por este secuestro, ha reconocido que ¨¦l mismo telefone¨® el 17 de agosto de 1995 y lo hizo de nuevo 12 d¨ªas m¨¢s tarde para informar a la familia que Cord¨®n hab¨ªa sido liberado. La revista Resistencia, ¨®rgano clandestino de los GRAPO, mantiene la misma versi¨®n. El Gobierno y la familia Cord¨®n insisten en que ¨¦ste sigue secuestrado.Este asunto se ha convertido en el principal obst¨¢culo, a pesar de que Cuadra, uno de los interlocutores de la banda, particip¨® en el secuestro. Cuadra est¨¢ preso en Sevilla II con otros 10 compa?eros (siete hombres y cuatro mujeres), adonde llegaron en agosto. Este agrupamiento les ha permitido mantener numerosas reuniones para debatir sus posiciones y transmitirlas al exterior mediante mensajeros autorizados.

Los grapos est¨¢n en las mismas celdas que ocuparon antes los presos de ETA. ?stos han sido trasladados y ya no queda ning¨²n miembro de esta organizaci¨®n en Sevilla II. Fuentes penitenciarias hacen hincapi¨¦ en que los GRAPO constituyen un "colectivo atomizado" y mucho menos compacto que ETA.Intervenci¨®n del Cesid

Los GRAPO han perpetrado m¨¢s de 80 asesinatos, adem¨¢s de varios secuestros y atentados con bombas, desde su nacimiento en 1975. Los actuales contactos entre sus representantes y los de Interior se remontan a 1994. El empuj¨®n que ha conducido las negociaciones al estado actual se debe al Cesid, a trav¨¦s del coronel Julio Leal, hombre de confianza de Emilio Alonso Manglano, ex jefe del servicio de ¨ªnformaci¨®n militar.

Agentes del Cesid han llegado a reunirse en Paris con Manuel P¨¦rez Mart¨ªnez, Camarada Arenas, secretario general del PCEr, brazo pol¨ªtico de los GRAPO. P¨¦rez Mart¨ªnez, seg¨²n fuentes conocedoras del proceso, se ha comprometido a regresar a Espa?a para dar una rueda de prensa anunciando la disoluci¨®n del GRAPO, en caso de que se alcanzara el acuerdo.

El Cesid tiene un calendario muy detallado tanto de las fases de los contactos como del proceso de reinserci¨®n de los grapos y la f¨®rmula con los retoques necesarios en los estatutos del PCEr para hacer posible su legalizaci¨®n.

El ¨²ltimo congreso del PCEr, celebrado en la clandestinidad en Par¨ªs en 1994, acord¨® mantener la lucha armada, pero sin provocar muertos, sino s¨®lo da?os materiales.