Athletic y Valladolid se desinflan

El Athletic se llev¨® de Valladolid un punto. Nada m¨¢s que eso. Dej¨®, eso s¨ª, una imagen refrigerada de lo que hab¨ªa sido su trayectoria hasta ayer y aprovech¨® el d¨¦bil momento en el que se encuentra el Valladolid. Esta vez el equipo bilba¨ªno no se hizo a imagen y semejanza de su entrenador, no fue una m¨¢quina de precisi¨®n obsesionada con el objetivo de anular al rival. Vivi¨® y dej¨® vivir, pero se encontr¨® con un equipo que le ayud¨® en su tarea. La p¨¦rdida de memoria de sus virtudes ha convertido al Valladolid, el equipo revelaci¨®n, en un conjunto normalito y con tremendos problemas para solucionar sus compromisos en Zorrilla. El equipo de Cantatore se ha desinflado, ha arruinado su intachable comportamiento y se encuentra a un paso de la tierra de nadie en la tabla.El Athletic ofreci¨® en el inicio una versi¨®n de s¨ª mismo muy distinta de la que pintaban las v¨ªsperas del partido. Salt¨® al campo con el dep¨®sito repleto de la gasolina obtenida en su victoria ante el Barcelona, pero esta vez su motor qued¨® bloqueado y sin ninguna opci¨®n aparente de combusti¨®n. La ausencia de Alkiza y la presi¨®n del Valladolid cegaron el cerebro bilba¨ªno que tuvo que arrimar el hombro para ayudar a su l¨ªnea m¨¢s d¨¦bil, una defensa que soport¨® media hora de constantes zarandeos. Luis Fern¨¢ndez movi¨® l¨ªneas, vano posiciones, pero su equipo estaba encogido y arrinconado y se limitaba a establecer sucesivos muros ante la porter¨ªa de Valencia.

Sin embargo, el de Vicente Cantatore es un equipo que ha extraviado el norte, que ha recuperado en su f¨²tbol el esquematismo de la pasada temporada. Cuando m¨¢s clara ten¨ªa que la meta para esta temporada deb¨ªa ser la permanencia se encontr¨® metido en la zona alta de la clasificaci¨®n, y cuando el sue?o de la UEFA se apoder¨® de la ciudad las goleadas ante el Barcelona y el Atl¨¦tico de Madrid deterioraron los instrumentos que hab¨ªa empleado para convertirse en el equipo revelaci¨®n.El dibujo del partido cambi¨® con el comienzo de la segunda parte. El cuadro bilba¨ªno hab¨ªa salvado los muebles y ten¨ªa 45 minutos para configurar una imagen parecida a la ofrecida siete d¨ªas atr¨¢s. El equipo de Luis Fern¨¢ndez rompi¨® el encuentro en un santiam¨¦n, sali¨® al campo con las ganas recuperadas y coloc¨® al Valladolid en un estado de precariedad que le dur¨® hasta el final.

El orden de la zaga de Vicente Cantatore qued¨® absorbido por la velocidad con que el bal¨®n se mov¨ªa por el campo, ninguno de los dos equipos era capaz de coserlo a su bota y el t¨¦cnico del Valladolid ech¨® mano de su banquillo. Sent¨® a Peternac, sac¨® a Harold Lozano y recuper¨® moment¨¢neamente el control de las operaciones, pero fue tan poco lo que le dur¨® al Valladolid la recuperaci¨®n que el Athletic, acaudillado por Julen Guerrero, lleg¨® a tener el partido en la mano.

Luis Fern¨¢ndez no hab¨ªa variado en nada sus esquemas, se hab¨ªa limitado a especular con un partido que se hab¨ªa tomado brusco y mantuvo a su equipo inicial con la sola variaci¨®n de su delantera. Julen lleg¨® al ¨¢rea, lo pis¨® con firmeza y se estrell¨® en las manos de C¨¦sar S¨¢nchez. El Athletic termin¨® por conformarse con un punto sacado de lo m¨¢s profundo del partido, del fr¨¢gil estado de ¨¢nimo del Valladolid y de su propia conciencia de que poco a poco puede retomar a la lucha entre los grandes de esta Liga.