El procurador mexicano ocult¨® informaci¨®n sobre el crimen de Ruiz Massieu

El laberinto de las investigaciones sobre los cr¨ªmenes pol¨ªticos que han sacudido a M¨¦xico desde 1993 sigue complic¨¢ndose. Detr¨¢s de la fulminante destituci¨®n del procurador Antonio Lozano (ministro de Justicia y responsable de las indagaciones), decidida el lunes por el presidente Ernesto Zedillo, no hay s¨®lamente un rosario de fracasos, sino adem¨¢s un turbio episodio de ocultaci¨®n de informaci¨®n.El asunto se refiere al asesinato de Jos¨¦ Francisco Ruiz Massieu, secretario general del gubernamental Partido Revolucionario Institucional (PRI), tiroteado en septiembre de 1994. La Procuradur¨ªa hab¨ªa encarcelado como autor intelectual a Ra¨²l Salinas, hermano del ex presidente Carlos Salinas. Despu¨¦s de varios meses sin lograr pruebas contundentes, los investigadores exhibieron triunfales un cad¨¢ver encontrado en una finca propiedad de Ra¨²l. El hallazgo se realiz¨® en un ambiente de feria, con la participaci¨®n de amantes y pitonisas.

El muerto deb¨ªa ser, seg¨²n todos los indicios, Manuel Mu?oz Rocha, un diputado del PRI desaparecido, c¨®mplice y testigo de la muerte de Ruiz Massieu, a quien Ra¨²l habr¨ªa cerrado la boca de forma poco ortodoxa, es decir, de un balazo en la cabeza. Ah¨ª estaba la prueba definitiva del caso.

Pues bien, seg¨²n ha declarado el responsable de los servicios periciales de la propia Procuradur¨ªa, Lozano sab¨ªa desde hace 15 d¨ªas que el cad¨¢ver hab¨ªa sido sometido, como se sospech¨® desde el principio, a una autopsia previa, por lo que las posibilidades de que fuera Mu?oz Rocha eran pr¨¢cticamente nulas. El procurador sin embargo, ocult¨® la informaci¨®n y desminti¨® rotundamente a los abogados de Ra¨²l Salinas, que afirmaron, tras unas filtraciones del equipo pericial, que el muerto era otra persona y que hab¨ªa sido sembrado en el jard¨ªn de su cliente.

El procurador Lozano, que ve¨ªa c¨®mo la hip¨®tesis de su investigador, Pablo Chapa, se desvanec¨ªa, hab¨ªa ido retrasando los plazos para informar sobre la identidad del muerto, e incluso el lunes, antes de su cese, dijo que era imposible saber a qui¨¦n correspond¨ªa el cad¨¢ver. El testimonio del jefe de los peritos, que no parece desde luego espont¨¢neo, le sirvi¨® al presidente Zedillo para destituir a Lozano sin mayores explicaciones.