El aspirante sigiloso
El Deportivo ya es segundo tras derrotar al Valencia en su mejor partido en Riazor

Ah¨ª lo tienen, sin levantar estridencias a su paso, sin acaparar titulares, agazapado con sigilo entre el ruidoso combate que libran los dos gigantes. El Deportivo est¨¢ ah¨ª mismo, invicto tras 16 jornadas, ¨²nicamente dos puntos por detr¨¢s del Madrid y segundo ya en la clasificaci¨®n por delante del Barcelona. Ayer no s¨®lo logr¨® sobrepasar a los azulgrana sino que disip¨® las dudas que hab¨ªa despertado la inconsistencia de su f¨²tbol en las ¨²ltimas jornadas. Los blanquiazules atraparon el partido con 25 minutos primorosos y ya no lo soltaron pese a la valerosa actitud del Valencia, un equipo que no arri¨® la bandera hasta que el ¨¢rbitro clausur¨® el duelo. El conjunto de Valdano se dio de bruces con una defensa impenetrable, que encaja goles muy de tarde en tarde -s¨®lo siete hasta ahora- pero sali¨® de Riazor con su imagen reforzada, por car¨¢cter y por juego. El Deportivo parece que necesita de est¨ªmulos fuertes. Frente a los rivales d¨¦biles se muestra indolente y especulativo; cuando se mide a equipos de su talla o afronta situaciones complejas -marcador en contra o inferioridad num¨¦rica, por ejemplo-los blanquiazules se inyectan vitaminas y se lanzan al pescuezo del adversario. Ayer no precisaba excusas para motivarse. Ten¨ªa la posibilidad de alcanzar el segundo puesto y en el ambiente reinaba la enemiga de la afici¨®n coru?esa al Valencia, ese equipo que cierta tarde de un mayo no muy lejano priv¨® al Deportivo de un t¨ªtulo de Liga. Y ya lo advert¨ªa la revista oficial del club, distribuida en el estadio: "Olvidar s¨ª, perdonar nunca".
En ese contexto emocional, el grupo de Toshack se anud¨® al partido con una actitud que ya se echaba de menos en Riazor. Presion¨® como nunca sobre la defensa rival y a cada futbolista que atrapaba la pelota se le ofrec¨ªan de inmediato tres o cuatro compa?eros para proponerle una buena soluci¨®n. Adem¨¢s volvi¨® Mauro Silva; y eso son siempre palabras mayores. Ya lo podr¨¢n machacar las lesiones o los intempestivos viajes a su pa¨ªs para embellecer las pachangas de la selecci¨®n. Cada jornada que est¨¢ en condiciones de echarse a la pradera, el brasile?o ofrece una exhibici¨®n descomunal. Mauro se hizo con el dominio absoluto de la zona de creaci¨®n y desde ah¨ª el Deportivo cosi¨® un f¨²tbol vigoroso y exquisito.
A la media hora la alegr¨ªa se hab¨ªa apoderado del estadio de tal forma que hasta Madar se decid¨ªa a tirar taconazos. Poco antes hab¨ªa llegado un gol excelente, una especie de rel¨¢mpago que deslumbr¨® en un parpadeo a la defensa del Valencia. Manjar¨ªn coloc¨® el bal¨®n en el pie de Rivaldo con un pase de 25 metros, de banda a banda. El brasile?o cedi¨® el honor del gol a Martins, el sexto que logra el franc¨¦s. Un premio merecido porque, entre la irregularidad de Rivaldo y las lesiones de Fran y Mauro Silva, Martins ha sido el mejor futbolista del Deportivo en el tramo inicial de la Liga.
El Valencia le ech¨® arrestos en el prop¨®sito de frenar la arrolladora salida de los gallegos, pero en la media hora inicial apenas si pudo hacer m¨¢s que contemplar los alardes del adversario. Se le apreciaron algunas descoordinaciones en el momento de tirar el fuera de juego y sufri¨® por su inferioridad num¨¦rica en el centro del campo -cinco camisetas de rayas contra cuatro blancas-. Con todo, los muchachos de Valdano hicieron lo imposible por mantenerse en pie. Y el partido se fue equilibrando seg¨²n corr¨ªa el tiempo. El Valencia vivi¨® en exceso de la vertiginosas irrupciones de Vlaovic, una flecha desbocada que protagoniz¨® las dos mejores ocasiones de gol de los visitantes. Al croata le falt¨® ayuda, como le falt¨® tambi¨¦n mayor inspiraci¨®n a Karpin, el hombre que tendr¨ªa que encender las luces en las cercan¨ªas del ¨¢rea.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
