Un grupo de 25 fil¨®sofos rinde tributo en Madrid a Gilles Deleuze en el aniversario de su muerte
La Complutense alberga unas jornadas sobre el "iconoclasta de la raz¨®n ilustrada"
"Toda escritura es una carta de amor", dijo Gilles Deleuze a modo de s¨ªntesis de su concepci¨®n de la filosof¨ªa como un pensamiento en proceso inextricablemente unido a la emoci¨®n vital. Un a?o despu¨¦s de su tr¨¢gica desaparici¨®n -arroj¨¢ndose al vac¨ªo desde su apartamento parisiense-, su irreductible imagen, de iconoclasta de la raz¨®n ilustrada, y de revulsivo, a la vez, de cualquier derrota o banalizaci¨®n del pensamiento, ha planeado a lo largo de esta semana en un aula abarrotada de alumnos de la Facultad de Filosof¨ªa de la Universidad Complutense de Madrid."Deleuze nos ha legado el valor de la diferencia, su positividad; y tambi¨¦n que pensar es una actividad que s¨®lo puede hacerse contra el propio pensamiento", se?al¨® el decano de la Facultad, Manuel Maceiras, en la presentaci¨®n de las jornadas, que han reunido hasta hoy a 25 fil¨®sofos o -aplicando a Deleuze- "cabezas buscadoras".
"Su pensamiento antepone la experimentaci¨®n l¨²dica a la interpretaci¨®n sistem¨¢tica", se?al¨® Francisco Mart¨ªnez, uno de los introductores de Deleuze en Espa?a. "Se trata de una ontolog¨ªa vitalista y materialista del devenir, que afirma la diferencia frente a la mismidad y la identidad dominantes", agreg¨®.
Diversas sesiones han abordado su representaci¨®n de la filosof¨ªa como "una cartograf¨ªa de los puntos de fuga", de las singularidades imperceptibles o novedosas y las l¨ªneas que se entrecruzan. "Combati¨® la escisi¨®n de ra¨ªz plat¨®nica entre la sensibilidad al uso y la experiencia art¨ªstica", dijo Angel Moll¨¢. "Lo conceptual y lo afectivo son en Deleuze indisociables. Resulta crucial su noci¨®n del estilo como la fuga que emprende la vida en el lenguaje", indic¨® Jose Luis Pardo, organizador del curso.
El m¨²sico Santiago Auser¨®n, que fue alumno de Deletize en La Sorbona, destac¨® que "su pensamiento se inscribe en el intervalo de la pasi¨®n" y relat¨® c¨®mo desoy¨® un consejo de su maestro para crear Radio Futura: "Una vez le pregunt¨¦ si no era m¨¢s eficaz hacer canciones que hacer conceptos, y me espet¨®: 'La eficacia, joven, es una noci¨®n teol¨®gica".
Miguel Morey elogi¨® su "coraje intelectual para perseguir el concepto hasta el final, hasta liberarlo de la apariencia", y estableci¨® un paralelismo entre lo teatral en Nietzsche y lo cinematogr¨¢fico en Deleuze. La decisiva influencia del pensador alem¨¢n en el franc¨¦s fue abordada por Andr¨¦s S¨¢nchez Pascual, para quien Deleuze toma de Nietzsche "el s¨ª dionisiaco, la afirmaci¨®n de la vida contra la negatividad del nihilismo, del resentimiento y de la mala conciencia", y, sobre todo, el rechazo a cualquier sistematizaci¨®n cerrada.
Pedagogo de lo dif¨ªcil
Las cr¨ªticas de Deleuze al psicoan¨¢lisis ocuparon tambi¨¦n diversas sesiones. Celia Amor¨®s repar¨® en "la naturalizaci¨®n del inconsciente" que emprende Deleuze, negando que el deseo sea anterior a las necesidades. "No hay carencia primig¨¦nea; en realidad deseamos porque primeramente necesitamos", explic¨®. Seg¨²n Jorge Alem¨¢n, "Deleuze no niega a Freud ni a Lacan, sino que se nutre de ellos. Su inter¨¦s por dar positividad al deseo y alumbrar otra clase de inconsciente es, en rigor, un perfeccionamiento heterodoxo del psicoan¨¢lisis". Fernando Savater, que hoy clausurar¨¢ las jornadas, define a Deleuze como "un pedagogo de lo dif¨ªcil de ense?ar, un gran sintetizador de conceptos.
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