El Gobierno planea suprimir el 60% de las publicaciones oficiales

El Gobierno se propone suprimir el 60% de las publicaciones profesionales, t¨¦cnicas o divulgativas que actualmente editan distintos ministerios, las Fuerzas Armadas y otros organismos estatales. Con esa medida, que se aplicar¨ªa a lo largo del a?o pr¨®ximo, podr¨ªan ahorrarse alrededor de 1.500 millones de pesetas, seg¨²n un alto cargo de la Administraci¨®n. Este plan forma parte de una serie de actuaciones encaminadas a coordinar aspectos que tienen que ver con la pol¨ªtica oficial de comunicaci¨®n.

Los contenidos de las publicaciones editadas por la Administraci¨®n se concentrar¨¢n en un n¨²mero de t¨ªtulos mucho m¨¢s reducido. El personal actualmente adscrito a la realizaci¨®n de las mismas ser¨¢ asignado a otras funciones, en el caso de que se trate de funcionarios.Otra cuesti¨®n en estudio por la Moncloa es el manejo de la publicidad institucional, esto es, la capacidad de la Administraci¨®n y de los organismos estatales para actuar como grandes anunciantes, que es muy grande. A falta de datos precisos sobre la cuant¨ªa del dinero que mueve la Administraci¨®n en estos menesteres, la empresa especializada Infoadex afirma que cuarenta grandes anunciantes institucionales realizaron inversiones por valor de 8.840 millones de pesetas en 1995, al margen de las importantes campa?as que llevan a cabo las empresas p¨²blicas.

Las fuentes gubernamentales antes aludidas admiten que centralizar el manejo de la publicidad institucional es un objetivo mucho m¨¢s dif¨ªcil de conseguir que recortar gastos en la edici¨®n de publicaciones. No s¨®lo por las grandes inversiones que planifican y deciden el Ministerio de Hacienda, a cuenta del pago de impuestos y la promoci¨®n de distintos juegos de azar, o el del Interior, a prop¨®sito de las campa?as de prevenci¨®n de accidentes; sino por la multiplicidad de organismos que intervienen en la contrataci¨®n de publicidad por parte del Estado. Ni esos departamentos soltar¨¢n f¨¢cilmente la competencia de decidir y contratar por s¨ª mismos, ni ser¨ªa f¨¢cil organizar una sola unidad en la Moncloa encargada de su control.

Autonom¨ªa ministerial

Sin pretender un cambio radical en la autonom¨ªa de ministerios y otros organismos a la hora de contratar publicidad, las fuentes gubernamentales antes mencionadas estiman que el ¨¢mbito adecuado para estudiar una cierta reordenaci¨®n de la. publicidad institucional es la comisi¨®n que pr¨®ximamente reunir¨¢ a representantes de los ministerios de Fomento, Cultura y Econom¨ªa -presididos por el secretario de Estado de Comunicaci¨®n, Miguel ?ngel Rodr¨ªguez- con la Asociaci¨®n de Editores de Diarios (AEDE).La formaci¨®n de dicho grupo de trabajo responde a las peticiones de apoyos a la prensa escrita que dicha instituci¨®n ha formulado al Gobierno.

El verdadero tal¨®n de Aquiles de la publicidad institucional no reside s¨®lo en las grandes campa?as, que dif¨ªcilmente cambiar¨¢n de orientaci¨®n y despliegue en los pr¨®ximos anos y que, previsiblemente, continuar¨¢n dirigi¨¦ndose a los grandes medios (televisiones, peri¨®dicos de difusi¨®n nacional y grandes cadenas de radio). Hay otras muchas inversiones publicitarias, de menor cuant¨ªa, que se pueden utilizar para apoyar a diarios y emisoras de radio regionales y locales.