La depresi¨®n aumenta la mortalidad por sida
La depresi¨®n echa le?a al fuego del sida hasta el punto de que puede acelerar la muerte de los enfermos. As¨ª lo acaba de demostrar un estudio realizado en la Universidad de California y publicado el pasado mes de octubre en Archives of Internal Medicine. Seg¨²n este informe, que analiz¨® durante tres a?os a 405 pacientes, destaca el valor predictivo del ¨¢nimo depresivo en el desenlace de la enfermedad. Otro m¨¢s reciente, publicado en noviembre en el American journal of Psiquiatry, abunda en esta idea y recoge sobre 911 pacientes "la dram¨¢tica elevaci¨®n sostenida de problemas psiqui¨¢tricos a medida que se desarrolla el sida".Las patolog¨ªas psiqui¨¢tricas, muy frecuentemente consecuencia de otro tipo de enfermedades org¨¢nicas, afectan a los enfermos de sida de forma m¨¢s dram¨¢tica, debido a las circunstancias m¨¦dicas y sociales que rodean a esta epidemia, como se puso de manifiesto en una reciente reuni¨®n organizada en el hospital de La Princesa de Madrid.
Porque el sida no s¨®lo ataca directamente el cerebro de los afectados, por la propia acci¨®n del virus, las infecciones por g¨¦rmenes oportunistas o el desarrollo de tumores. Como puso de manifiesto Eduardo Garc¨ªa Camba, jefe de secci¨®n de psiquiatr¨ªa de La Princesa, hay que tener en cuenta en los trastornos psiqui¨¢tricos de los afectados por el VIH "la enfermedad Sist¨¦mica avanzada e, incluso, Ios efectos neuropsiqui¨¢tricos de los medicamentos utilizados para el tratamiento de estos pacientes. A. ello hay que a?adir el efecto psicol¨®gico negativo que tiene el diagn¨®stico, la problem¨¢tica social a?adida y los retos personales que para el paciente plantea la nueva situaci¨®n".
El tratamiento de esta enfermedad requiere cada d¨ªa m¨¢s un abordaje multidisciplinar en el que intervienen tambi¨¦n los psiquiatras. La propia unidad psiqui¨¢trica de La Princesa tiende habitualmente a entre un 15 y un 20% de los enfermos e sida ingresados en el centro. La prevalencia de estos trastornos es complicada de cuantificar, advierte Garc¨ªa Camba, por la dificultad que entra?a comparar pacientes de en disinta situaci¨®n social, familiar y estad¨ªo de la infecci¨®n.
Con todo, Eduardo Garc¨ªa Camba subraya la necesidad de fomentar en el ¨¢mbito m¨¦dico la sensibilidad sobre estos trastornos a fin de que se detecten y traten de la manera m¨¢s precoz posible.
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