El 96 les sacudi¨® la vida
Nueve episodios de personas que pasaron por la actualidad sin haberla buscado
Perdieron la casa y encontraron trabajoUna mala tarde de julio, un vecino de la calle de Almansa 58, en el barrio de Tetu¨¢n vio c¨®mo en la pared de su habitaci¨®n se dibujaba de repente una grieta fe¨ªsima. Comprendi¨® en un segundo: las excavadoras que constru¨ªan en el solar adyacente un aparcamiento hab¨ªan herido de muerte los cimientos de su inmueble. Las 15 familias que viv¨ªan ah¨ª tuvieron que dormir fuera por el riesgo de que todo se derrumbara precipitadamente con ellos dentro.
Pero lo peor estaba por llegar. Al d¨ªa siguiente, las m¨¢quinas del Ayuntamiento echaron abajo, por razones de seguridad, la mitad del edifico (el resto vendr¨ªa despu¨¦s). Los residentes pudieron rescatar s¨®lo tres o cuatro cosas que pesaran poco, apuntadas previamente en una lista.
Entre los que escribieron esa lista, que conten¨ªa lo que uno juzga en cinco minutos realmente indispensable, se encontraban Mariano Gin¨¦s y Soledad Gin¨¦s, de 35 y 34 a?os, respectivamente. Obligados a residir durante dos meses en una pensi¨®n, a desayunar y comer en bares, a abandonar su trabajo por la necesidad de cuidar de su hija y de ocuparse del papeleo, la mala suerte les ha perseguido durante mucho tiempo. Desde hace cuatro meses viven en un piso en Lavapi¨¦s de la Empresa Municipal de la Vivienda por el que pagan 13.000 pesetas al mes.
Han recibido seis millones de Sermoca, la empresa que les destruy¨® su casa -a cambio de los terrenos, pero a¨²n les deben cuatro. Podr¨¢n comprar un, piso de la EMV dentro de dos a?os en el Pinar de Chamart¨ªn, aunque no les gusta el sitio. Desconf¨ªan.
Pero no todo se derrumb¨®: un conocido de Mariano, al enterarse de que el destino le hab¨ªa jugado una mala pasada a su amigo, le llam¨® y le ofreci¨® un puesto en el mercado de San Antonio, en Cuatro Caminos, cerca de su vieja casa. Mariano y Soledad aceptaron. Y se pusieron a enderezar con ganas, desde una poller¨ªa, la vida que las excavadoras de Sermoca torcieron una mala tarde del mes de julio.-
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