"Ni Pisuerga ni Arlanz¨®n: pecados originales y vinotecas"
Hay que escuchar, ya, a Franciso Berciano, conocido por Paco en su Vinoteca, (947) 20 62 89, de Burgos y en toda la redondada de comeres y beberes de Casilla y Le¨®n: "Antes se beb¨ªa por tradici¨®n y ahora se bebe por afici¨®n; y nuestra obligaci¨®n es que ese cambio sea civilizado y culto". Cervantes no hubier¨¢ dicho tanto. Paco, en su vinoteca, explica lo que dice con unas 40.000 botellas que hablan de todos los vinos espa?oles, de 80 referencias francesas, de vinos australianos, italianos, californianos, chilenos, es decir, de todos los espacios vin¨ªcolas que cuentan en el mundo; sin olvidar el Oremus, el vino dulce, ex¨®tico, cat¨®dico absolutamente, que hace de los postres una pirueta sexual.En Burgos, para comer no hay que dudar: hay toda la raza castellana en cuerpo y alma, y novedades. En Casa Avelino, (947) 20 61 92, se eleva a categor¨ªa musical la caza por poco m¨¢s de 2.000 pesetas. En El Pancho, (947) 20 34 05, no se come en t¨¦rminos de comedor de gran regla. Pero las tapas y la comida informal se dejan asesorar por los colores, olores y sabores de mil botellas de grandes vinos resguardadas de toda intemperie en una vinoteca climatizada; y hasta en la barra, otro aparato similar arropa el vino de categor¨ªa que se sirve por copas. Ojeda, (947) 20 63 43, es el restaurante burgal¨¦s de toda la vida, seguro (4.500 pesetas); hace 80 a?os, adem¨¢s, que en esta catedral burgalesa se olfatean vinos y vinos. Y tampoco se pierde la vida por cuatro mil pesetas y pico, sino al rev¨¦s, en El Mes¨®n del Cid, (947) 20 87 15; ya son casi los dedos de una mano las generaciones que ofrecen aqu¨ª los vinos m¨¢s decideros de la Ribera del Duero. El lujo, y la buena comida tambi¨¦n, que nadie lo dude, se hospedan en el hotel Landa Palace, (947) 20 63 43.
Y como el tramo es menguado, con el tiempo para una digesti¨®n metab¨®lica y literariamente escrupulosa, despu¨¦s de almorzar en Burgos, donde el r¨ªo Arlanz¨®n perdi¨® la atenci¨®n que le roban todos los pacobercianos del lugar y for¨¢neos, se puede cenar en Valladolid, sin asomarse al r¨ªo Pisuerga, que le dio tanto conocimiento. En Pucela, si hay que comprar, se va uno directo a Pecados Originales, (983) 39 23 26, la tienda de vinos apenas nacida y ya afamada por el quehacer de los amantes infinitos del vino, Vicky, de profesi¨®n en¨®loga, y el director gerente de este nuevo santuario, Jes¨²s Soto; pega a la catedral en el pasaje de Guti¨¦rrez, y en su planta subterr¨¢nea se despachan todas las botellas y se ofrecen catas de todos los vinos de Espa?a y algunos de Burdeos; y de Australia, el Penfolds, el gigante de aquellos parajes inauditos (elabora 200 de los 600 millones de botellas de todo el pa¨ªs). Vicky y Jes¨²s despachan tambi¨¦n el Oremus h¨²ngaro, que trata en aquellas tierras Vega Sicilia; y oportos tambi¨¦n, claro. Otra tienda de visita es Gran Cava Santos (983) 30 24 52: vinos espa?oles, incluidos los de Toro y El Bierzo; tambi¨¦n pintan los de Oporto en su exposici¨®n permanente, y los dulces ya citados. ?Y por qu¨¦ no recordar que en Valladolid, como en tantos otros Corte Ingl¨¦s, su tienda de gourmets expone la m¨¢s amplia gama de vinos de calidad, nacionales y de otras tierras? Queda recordado.
En Valladolid, la tradici¨®n dice que hay que comer en La Fragua, (983) 33 87 85; y se come el tost¨®n exquisito y todo el muestrario con el que Castilla se debe a la historia y pretende el futuro; y con la buena moneda hay que, al final, ense?ar unas 5.000 pesetas. En La Goya, (983) 35 57 24, tambi¨¦n se da de comer y beber castellano por no mucho m¨¢s de 3.500 pesetas. Y en La Perla de Castilla, (983) 37 18 28, la familia que atiende el comedor y la cocina, siendo de su tierra, no se privan de retocar los platos de siempre con un capricho. Hay que pagar 3.500 pesetas, o m¨¢s, pero todas las comodidades tienen su sitio en este sitio.
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