Hebr¨®n o la fuerza de Oslo

El acuerdo alcanzado entre Israel y los palestinos es a¨²n dif¨ªcil de interpretar, pero ( ... ) marca el retorno a un proceso de negociaci¨®n que muri¨® tras la llegada al poder de Netanyahu. La din¨¢mica de los acuerdos de Oslo ha sido la m¨¢s fuerte. Los documentos ( ... ) han vencido sobre la voluntad del jefe de la derecha nacionalista. Pero Netanyahu intentar¨¢ tergiversar la aplicaci¨®n del acuerdo. Esto no impide que el jefe del Likud haya rubricado la cesi¨®n de una parte del Gran Israel. Y lo que es m¨¢s, para entreg¨¢rselo a la Autoridad Palestina, es decir a la OLP... ( ... ) El acuerdo es importante por su alto contenido simb¨®lico. ( ... ) Con 10 meses de retraso, el Ej¨¦rcito israel¨ª se retirar¨¢ parcialmente de Hebr¨®n. (...) Aunque la ciudad seguir¨¢ siendo un foco de tensi¨®n, ( ... ) Arafat aumenta con Hebr¨®n el poco control que ejerce sobre CisJordania. ( ... ) De aqu¨ª a agosto de 1998, la Autoridad Palestina querr¨ªa hacerse cargo del 80% al 85% de Cisjordania. Evidentemente, el acuerdo no establece plazos tan claros. En este caso, los pesimistas tienen raz¨®n en sus advertencias. A¨²n ayer, Netanyahu afirmaba que los acuerdos de Oslo no le compromet¨ªan de ninguna manera a irse de Cisjordania. Para aplacar a sus extremistas, ya en abierta rebeli¨®n, va a dar largas. Cada repliegue dar¨¢ lugar a una batalla tan dif¨ªcil como la de Hebr¨®n. Pero, por lo menos, el resultado de esta ¨²ltima permite seguir el camino para la paz.