SAMPAIO, ATRAPADO

"Disculpen este estado lamentable, pero ya saben el infortunado accidente que sufr¨ª". Fueron las primeras palabras del presidente de la Rep¨²blica Portuguesa, Jorge Sampaio, con los zapatos sucios de barro, nada m¨¢s llegar a la localidad alentejana de Borba. Poco antes, el jefe del Estado hab¨ªa tenido que permanecer atrapado en un ascensor, durante m¨¢s de veinte minutos, a una altura de 40 metros. El elevador de la cantera que visitaba en ?vora sufri¨® una repentina aver¨ªa por exceso de carga (viajaban 12 personas, cuando el m¨¢ximo permitido es de 10), lo que sembr¨® la inquietud entre la delegaci¨®n que le acompa?aba. Un empleado de la compa?¨ªa tuvo que escalar hasta el ascensor para desbloquear el mecanismo averiado. El susto no afect¨® al presidente, que estuvo bromeando con el c¨¢mara de televisi¨®n que le acompa?aba. "Ha pillado usted el reportaje de su vida", ironiz¨® ante el periodista. Abajo, los organizadores de la visita y los asesores del presidente no intercambiaban precisamente bromas.-,