CORDERO AL 'AZOR'
Un oloroso asador de corderos y morcillas acoge desde esta semana, en los alrededores de Burgos, el puente de mando y la proa del yate Azor, del general Franco; un transporte especial de 40 ruedas traslad¨® hasta all¨ª, desde el puerto de Requejada (Cantabria), estas singulares piezas de la moderna historia de Espa?a, ahora lejos del salitre y el yodo del Cant¨¢brico. Su propietario, el empresario tur¨ªstico L¨¢zaro Gonz¨¢lez, conf¨ªa en que sirvan de incentivo publicitario para atracci¨®n de la clientela tanto o m¨¢s que el museo de instrumentos agrarios que ha creado en la misma finca. Por unos cinco millones de pesetas, Gonz¨¢lez compr¨® hace cinco a?os a la Armada espa?ola este legendario vestigio del franquismo, comprometi¨¦ndose a desguazarlo. En 1993, el due?o del Azor, anclado en Requejada, no tuvo demasiado ¨¦xito al promover un r¨¦gimen de visitas a bordo a 300 pesetas la entrada. Ahora, Gonz¨¢lez se ha llevado a su restaurante las m¨¢s significativas piezas del yate. La proa, con el nombre bien a la vista, del Azor ha viajado de aparatoso inc¨®gnito hasta Castilla. Probablemente m¨¢s ¨¦xito de p¨²blico tendr¨¢ en el asador el olor de los corderos.- ,
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