Motherwell lleva al Museo Reina Sof¨ªa la "desesperaci¨®n moral" de un artista

"La pintura de Motherwell se siente". Dore Ashton, conocedora de la obra de Robert Motherwell (Aberdeen, Washington, 1915-Provincetown, Massachusetts, 1991) y de los dem¨¢s artistas del expresionismo abstracto vinculado a la Escuela de Nueva York, present¨® ayer, en el Museo Nacional Reina Sof¨ªa, de Madrid, una retrospectiva con 70 cuadros, ya vista en Barcelona. "Expresa la desesperaci¨®n moral como pintor y humanista" dice Ashton sobre el artista, en cuya pintura aparecen temas espa?oles, desde la guerra civil al color negro. Uno de los cuadros expuestos, Presencia amenazante, de 1976, acaba de ser adquirido por el museo para su colecci¨®n permanente.

La exposici¨®n, inaugurada ayer por la infanta Elena, ha sido organizada por la Fundaci¨®n T¨¢pies, de Barcelona, de donde procede, en una coproducci¨®n con el Reina Sof¨ªa, que ha contado con el patrocinio de las empresas Chrysler, Jeep Iberia e Iberia. El museo ha comprado una de las obras expuestas a la Fundaci¨®n Dedalus, de Nueva York, que administra el le gado del artista y s¨®lo vende a museos. Tambi¨¦n est¨¢ en negociaciones para adquirir otro cuadro e incorporarlos a la colecci¨®n permanente. El director del museo, Jos¨¦ Guirao, declara que el pintor tuvo una gran influencia en el arte espa?ol a partir de los a?os cincuenta.El espacio dedicado a Janis Kounellis, en la planta baja del Museo Nacional Reina Sof¨ªa, ha dado paso a los grandes lienzos de Robert MotherweIl, junto con otras pinturas sobre papel, collages y dibujos. Un total de 70 cuadros se distribuyen por las galer¨ªas, sin orden cronol¨®gico salvo una sala donde se agrupan sus primeras obras, de 1941, pintadas en M¨¦xico, durante un viaje con el surrealista Roberto Matta.

Dore Ashton, autora de La Escuela de Nueva York (C¨¢tedra) y otros ensayos sobre el expresionismo abstracto norte americano, ha preparado la retrospectiva desde su conocimiento personal de MotherweIl y la aportaci¨®n de Estados Unidos al arte moderno. La muestra, abierta al p¨²blico hasta el 5de mayo, est¨¢ acompa?ada por un cielo de tres conferencias. Tras la apertura de Dore Ashton, en torno al pintor y el reflejo de su personalidad en las obras expuestas, el conservador jefe de pintura y escultura del Museo Nacional de Arte Americano (Smithsonian Institute), Harry Rand, hablar¨¢ hoy y ma?ana, en el mismo museo, sobre la ¨¦poca del artista y su obra como "puerta a la posmodernidad". "Era un hombre civilizado, de grandes incertidumbres, con una manera de pensar filos¨®fica que planteaba cuestiones dif¨ªciles", asegura Dore Ashton, quien durante su estancia en Espa?a tuvo tiempo para conocer en Bilbao el edificio del Museo Guggenheim, al que calific¨® de "monstruo".

La historiadora y comisaria de la exposici¨®n destaca la formaci¨®n acad¨¦mica de Motherwell, sus trabajos en la universidad, su pasi¨®n por Joyce y Elliot, en ¨¦poca de grandes cambios sociales, mientras en Nueva York los pintores sosten¨ªan "discusiones feroces" sobre el arte moderno. Eran los artistas de su generaci¨®n, como Rothko, Pollock, Baziotes, De Kooning, Newman, que fijaron para la historia del arte el expresionismo abstracto. La guerra civil espa?ola y el mural Guernica dejaron una memoria traum¨¢tica, explicada por Malraux, y la guerra europea le puso en contacto con, los surrealistas, sobre todo Breton y Matta, con quien viaja a M¨¦xico en 1941.

"Cuando se expuso el Guernica en Nueva York, los pintores vieron que era la obra crucial de sus vidas, como si les diera permiso para hablar de algo de lo que sent¨ªan con el vocabulario de la pintura abstracta", dice Dore Ashton. De b¨²squeda, en lugar de repetici¨®n, considera la serie del pintor sobre la guerra civil espa?ola, la Eleg¨ªa a la Rep¨²blica Espa?ola, de la que en la exposici¨®n figuran tres lienzos, aunque lleg¨® a realizar cerca de 200 obras. "El arte ten¨ªa una funci¨®n que se vinculaba al mundo de la ¨¦tica. Pintar un cuadro es un acto ¨¦tico". Las dos vertientes de su trabajo,- la invenci¨®n y la variaci¨®n, aparecen en el montaje, desde la vertiente tierna de sus collages a la desesperaci¨®n moral. "El arte como portador de la civilizaci¨®n".