Aena rebaja en superficie y presupuesto la nueva terminal de Madrid-Barajas
Los equipos concursantes consideran duras las condiciones y escasos los premios
La tercera redacci¨®n del pliego de prescripciones t¨¦cnicas del concurso para el nuevo edificio terminal del aeropuerto de Madrid-Barajas, entregado el mi¨¦rcoles a los 21 equipos de ingenieros y arquitectos seleccionados por el organismo p¨²blico Aeropuertos Nacionales y Navegaci¨®n A¨¦rea (Aena), abre la participaci¨®n a otros profesionales y deja libertad de dise?o. Tambi¨¦n se reducen la superficie del proyecto y el m¨¢ximo de los honorarios, que se fija en 2.000 millones de pesetas. Los cambios del modelo y las condiciones provocaron la retirada del arquitecto brit¨¢nico Norman Foster, y el malestar se extiende a otros estudios, que han recordado la experiencia del concurso del Prado.
Los equipos que quieran acompa?ar a los 21 que presentaron su participaci¨®n en el "concurso para la contrataci¨®n de la asistencia t¨¦cnica para el dise?o t¨¦cnico de la nueva ¨¢rea terminal (NAT) del aeropuerto de Madrid-Barajas" tendr¨¢n que cumplir 100 p¨¢ginas de condiciones, con los perfiles de las empresas y su capacidad para el proyecto, as¨ª como la experiencia en aeropuertos.Tambi¨¦n han de tener en cuenta las conclusiones de los estudios realizados sobre la ampliaci¨®n del aeropuerto con una tercera pista, iniciados en la etapa socialista del ministro Borrell, desde el mismo modelo de funcionamiento al impacto medioambiental. Esta es una de las novedades de la ¨²ltima redacci¨®n, que se considera coherente por los equipos consultados.
Otro elemento que se incorpora al concurso de ideas es la libertad de dise?o, ya que no se impone ning¨²n modelo para la nueva ¨¢rea terminal. El modelo Borrell era una gran terminal con un sat¨¦lite para acudir a los aviones. En un principio se apostaba por la forma en equis, con un edificio central del que sal¨ªan las pasarelas de acceso a los aviones. En la segunda redacci¨®n de las bases figuraba el edificio central con tres o cinco sat¨¦lites, en las dos fases de construcci¨®n, y en el ¨²ltimo texto no hay imposici¨®n de formas arquitect¨®nicas. Para el proyecto de ideas se trabaja sobre un ¨²nico edificio con plataforma para las aeronaves.
El modelo de ampliaci¨®n se ha reducido en superficie, que se limita, a 140.000 metros cuadrados (antes 200.000), con objeto de "ahorrar dinero", seg¨²n un portavoz de Aena. La rebaja tambi¨¦n afecta a los honorarios del proyecto, que se sit¨²an en un m¨¢ximo de 2.000 millones de pesetas, cuando antes figuraban 3.500 millones, lo que afecta al conjunto de la arquitectura y el urbanismo."Ahorrar dinero"
La inversi¨®n del proyecto se ha situado en 30.000 millones de pesetas en la primera fase, quedando la segunda pendiente de la ordenaci¨®n del control del tr¨¢fico a¨¦reo. Con el plan Borrell la cifra lleg¨® a los 80.000 millones de pesetas. "El plan era demasiado ambicioso, y el de ahora es m¨¢s racional y se ahorra dinero", seg¨²n Aena.
Para acudir al concurso, cuyo plazo de entrega termina el 21 de mayo, se han formado uniones temporales de empresas, con predominio de las extranjeras, que aportan la experiencia de realizaciones en otros aeropuertos europeos. En los equipos aparecen nombres de arquitectos que han realizado obras complejas en los ¨²ltimos a?os en aeropuertos, museos o rascacielos, como Richard Roger, Santiago Calatrava, Ricardo Bofill, Frank Gehry, Rem Koolhaas y C¨¦sar Pelli. Otros espa?oles participantes son Miguel de Oriol y Gerardo Ayala.
Cada equipo est¨¢ formado por tres o cuatro firmas vinculadas a las grandes empresas constructoras o bancos, que aportan su experiencia en ingenier¨ªa civil e, industrial, a los que se unen los arquitectos, ya que los proyectos se firman conjuntamente. Entre los estudios espa?oles que se han asociado con otros profesionales figuran Aepo (Cubiertas), Intecsa (Dragados), Iberinsa (Entrecanales), aunque tambi¨¦n hay consultoras, como Typsa, de Pablo Bueno, o T¨¦cnicas Reunidas, de Jaime Garc¨ªa A?overos y Jos¨¦ Llad¨®.La retirada de Norman Foster, como ocurri¨® tambi¨¦n con el concurso internacional de ideas para ampliar el Museo del Prado, que qued¨® desierto, est¨¢ relacionada con las condiciones del dise?o t¨¦cnico de la nueva ¨¢rea terminal -en otros pa¨ªses concursan s¨®lo cinco o seis equipos- y con los premios que se conceden. Se mantiene la redacci¨®n del segundo texto del pliego y se establecen tres millones de pesetas para los proyectos que superen una primera selecci¨®n y cuatro acc¨¦sit de 10 millones de pesetas cada uno. El equipo ganador se encargar¨¢ de la redacci¨®n del proyecto definitivo.
La falta de trabajo en Europa y la escasez de este tipo de proyectos obliga a la participaci¨®n de las grandes firmas internacionales de ingenier¨ªa y arquitectura, que llegan a tener 150 empleados, a pesar de que la realizaci¨®n de un anteproyecto como el de la terminal para Madrid-Barajas, con maquetas, planos y estudios, puede llegar a un gasto de 20 millones de pesetas.
"Mi opini¨®n me la guardo", declar¨® ayer el arquitecto Miguel de Oriol, que se presenta con Cwfentress, Bradburn and Associates y Ghesa Ingenier¨ªa y Tecnolog¨ªa. Oriol, quien tambi¨¦n acudi¨® al del Prado sin estar entre los 10 finalistas, se?al¨® que est¨¢ trabajando en el concurso, a pesar de los esfuerzos, porque "Madrid se lo merece"
"Ser¨¢ una arquitectura de gran modernidad", adelanta Rogelio Jim¨¦nez, del Taller Arquitectura Internacional Partnership, SL (Ricardo Bofill), al plantearse en estas grandes superficies nuevas relaciones entre , el edificio, las personas y el uso. "No hay que tener complejos al acometer estos proyectos", a?ade.
Babelia
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