Un plan de empleo pacifica a la coalici¨®n italiana

No se sabe a¨²n de d¨®nde saldr¨¢n los fondos necesarios para financiarlo, pero el anuncio de que el Gobierno italiano prepara un plan de emergencia orientado a crear 500.000 nuevos puestos de trabajo en un plazo no bien determinado parece haber contribuido a implantar la paz entre los revueltos partidos que sostienen al primer ministro, Romano Prodi, y, especialmente, entre el Partido de la Refundaci¨®n Comunista (PRC) y el resto.El plan, que ser¨¢ aprobado la semana pr¨®xima despu¨¦s de que el presidente de la Rep¨²blica, Oscar Luigi Scalfaro, haya convocado al Gabinete, con una intervenci¨®n poco ortodoxa, para destacar la gravedad de un desempleo que ya afecta al 13%) de los italianos (y a m¨¢s del 23% de los sicilianos), prev¨¦ un conjunto de medidas que van desde la flexibilizaci¨®n del empleo y concesi¨®n de pr¨¦stamos a nuevos empresarios hasta la movilizaci¨®n de fondos p¨²blicos por valor de 11 billones de liras (unos 860.000 millones de pesetas) para obras p¨²blicas. Simult¨¢neamente, Massimo D'Alema y Fausto Bertinotti, como los pol¨ªticos m¨¢s enfrentados de la coalici¨®n, en sus respectivas calidades de l¨ªder del Partido Democr¨¢tico de la Izquierda (PDS) y del PRC, anunciaron que el pacto de apoyo al Gobierno sigue y que mantenerlo es prioritario. Esta declaraci¨®n trata de poner fin a las pol¨¦micas entre estos pol¨ªticos y Prodi por la entrevista del primer ministro con EL PAIS, publicada el pasado domingo, en la que Prodi dijo que el PRC frenaba a su Gobierno y que D'Alema no tiene el apoyo electoral necesario piara competir con ¨¦l como primer ministro. El debate posterior hizo que la prensa italiana temiera por la continuidad del Gabinete.

El deseo de seguir adelante no quiere decir que las diferencias entre el PRC y los dem¨¢s partidos de la coalici¨®n, en materias como el plan de ajuste financiero o las privatizaciones, est¨¦ superado. Pero Bertinotti ha expresado, al menos, su disponibilidad para celebrar una cumbre que trace un compromiso a medio plazo. Hasta ahora, ¨¦l secretario de los comunistas hab¨ªa rechazado todo intento de estabilizar su voluble apoyo al Gobierno.