El mundo de la cultura dedica dos meses de homenaje a Pedro Lain Entralgo

Pedro La¨ªn Entralgo ha llegado a los 89 a?os con la memoria y la lucidez casi intactas. Pero ayer, en su casa de la Residencia de Profesores de la Universidad Complutense de Madrid, rodeado de libros, se mostraba abrumado por lo que se avecina. "Con toda sinceridad, creo que la sociedad espa?ola me ha dado mucho m¨¢s de lo que he merecido, y la expresi¨®n m¨¢xima de eso es este homenaje, que me suscita tanta confusi¨®n como agradecimiento". El pen¨²ltimo sabio-"No hay que hablar nunca de lo ¨²ltimo, sino de lo pen¨²ltimo"- se refiere al apretado programa de actos que, por iniciativa espont¨¢nea de un grupo de amigos, va a rendir tributo a su figura a lo largo de los dos pr¨®ximos meses.

Las diez mesas redondas del ciclo -La¨ªn afirma que intentar¨¢ asistir a todas, "pero calladito y entre el p¨²blico"- se inician esta tarde y se prolongar¨¢n hasta la ¨²ltima semana de mayo. Abren el fuego en la Residencia de Estudiantes, a las 19.30, Pedro Cerezo, Antonio Largo Carballo y Juan Marichal. Pero hay muchos m¨¢s intelectuales, amigos, disc¨ªpulos y admiradores anunciados: Emilio Lled¨®, Rafael Lapesa, Carlos Seco Serrano, Fernando Mor¨¢n, Miguel Artola, Jos¨¦ Vidal Beneyto, Pere Gimferrer... "Y la lista de adhesiones sigue multiplic¨¢ndose", dice Teresa de Angulo, miembro del comit¨¦ organizador, formado adem¨¢s por Jaime Garc¨ªa A?overos, Jos¨¦ G¨®mez Caffarena, Diego Gracia, Antonio Menchaca, Manuel Reyes Mate y Javier Muguerza. "Es importante que una idea civil haya recogido el apoyo de tantas instituciones y empresas [C¨ªrculo de Bellas Artes, CajaMadrid, Fundaci¨®n Santillana, C¨ªrculo de Lectores, CIS, Club Siglo XXI ... ]", a?ade, "y ahora lo que hace falta es que sirva para recordar a los j¨®venes -de ah¨ª que se haga casi todo en la universidad- que esta fr¨¢gil democracia es consecuencia de que gente como La¨ªn cambi¨® sus privilegios por un esp¨ªritu liberal y abierto, contrario al r¨¦gimen franquista".

"El se la jug¨® en l956", a?ade Angulo, "con Joaqu¨ªn Ruiz-Gim¨¦nez, lo que provoc¨® su salida del puesto de rector en la Complutense. Su postura permiti¨® en un momento imposible el verdadero inicio de la transici¨®n, animando a la disidencia a otros catedr¨¢ticos como Aranguren, Tierno y Garc¨ªa Calvo". El psiquiatra Carlos Castilla del Pino, que tambi¨¦n se ha adherido al homenaje, considera la evoluci¨®n pol¨ªtica y personal del acad¨¦mico [desde el bando nacional al exilio interior], "un proceso ¨ªntimo, del cual queda el esfuerzo constante que La¨ªn ha hecho en pro de la convivencia". Los actos mostrar¨¢n esa faceta del premio Pr¨ªncipe de Asturias, pero tambi¨¦n la multiplicidad de intereses y temas de los que se ha ocupado durante tantos a?os este m¨¦dico, historiador de la medicina, qu¨ªmico, psiquiatra, fil¨®sofo, fil¨®logo y pluriacad¨¦mico -Lengua, Historia y Medicina- La amistad, la diversidad cultural de Espa?a, Espa?a y Europa, el problema del hombre, la ciencia, la filosof¨ªa del hombre que espera o el cuerpo y el alma ser¨¢n algunos de los asuntos que ocupar¨¢n al cerca de medio centenar de ponentes. "Bueno, lo multidisciplinar no es una caracter¨ªstica estrictamente m¨ªa", explica La¨ªn. "Todos los intelectuales espa?oles relevantes han demostrado su amor a m¨²ltiples dedicaciones y compromisos. Unamuno, Ortega, Mara?¨®n, por citar s¨®lo a tres de los mas eminentes. Aranguren, Tovar y Mar¨ªas, por ejemplo, o m¨¢s modestamente yo mismo, hemos sido herederos de esa multiplicidad".

Y entre ella, siempre la pasi¨®n, a?ade el autor de Descargo de conciencia, libro crucial en el que La¨ªn revis¨® su adscripci¨®n al franquismo: "Todo lo he tocado desde dentro. Fui un apasionado de la docencia y la investigaci¨®n, lo fui del estudio del problema de la Espa?a de la segunda mitad del XIX y la primera del XX, igual que lo he sido en los ¨²ltimos anos, al mirar la cuesti¨®n del hombre y el cuerpo, en la que me he metido hasta el cuello con apasionada serenidad".

?Y las pasiones vitales? "Las personas a las que he amado, y de las que he sido amigo, han sido mis otras pasiones. En mi familia, el amor intrafamiliar era sentido y vivido de una forma muy noble. Mi padre era republicano, liberal, y no creyente, y mi madre una cat¨®lica muy firme, pero ambos se respetaron siempre, y eso cre¨® en m¨ª el germen de la reconciliaci¨®n, de la convivencia entre iguales, el de tolerar la disidencia pero no la enemistad". Autor en esta ¨²ltima ¨¦poca de libros como Idea del hombre - el ¨²ltimo que ha publicado- y El cuerpo humano, La¨ªn recuerda con especial satisfacci¨®n otros m¨¢s antiguos, como sus estudios sobre Meri¨¦ndez Pelayo y la Generaci¨®n del 98: "Estaban tocados por la voluntad de comprensi¨®n y de res tablecimiento de la cultura espa?ola, de toda la cultura espa?ola. Creo, modestamente, haber ser vido siempre, con todas mis fuer zas, a ese ideal".