Cheques y "caballo de Troya"
Si hasta ahora la lista de los 22 Estados que reclaman tremendos cheques a la industria del tabaco era ya notable, el fallo de Misisip¨ª puede dar alas a los que tienen dudas y est¨¢n siguiendo muy atentamente los vericuetos jur¨ªdicos de este frente de la guerra del tabaco. Como se?al¨® James Doyle, responsable de Justicia de Wisconsin, cuando su Estado se subi¨® al carro de las demandas, "la batalla contra las tabaqueras ha alcanzado la mayor¨ªa de edad".La industria trata de mantener la calma y despliega su potente ej¨¦rcito de abogados. Gregory Little, asesor legal de Phillip Morris, reaccion¨® de esta forma cuando el n¨²mero de Estados demandantes pas¨® de 20: "Estas demandas tienen defectos fundamentales, tanto jur¨ªdicos como f¨¢cticos, y creemos que en ¨²ltima instancia los Estados perder¨¢n, trasgastarse millones de d¨®lares del contribuyente en el tiempo empleado y en los costes". Los fiscales no parecen muy impresionados por este pulso econ¨®mico. Por eso es f¨¢cil entender que los mercados financieros hayan olfateado problemas serios en el futuro de la industria.
Otro factor que complica enormemente la vida a las tabaqueras es la existencia de un caballo de Troya, como es el grupo Liggett, que anunci¨® en marzo de 1996 que estaba dispuesto a reconocer su responsabilidad en los gastos de salud p¨²blica causados por el tabaco y a llegar a un acuerdo de indemnizaci¨®n fuera de los tribunales. Si la estrategia de Liggett sale adelante -el acuerdo es inminente- habr¨¢ dado un golpe mortal a la industria, que hab¨ªa conseguido hasta ahora salir airosa de sus complicaciones jur¨ªdicas gracias a presentar un frente monol¨ªtico y a no admitir jam¨¢s que hay relaci¨®n directa entre el tabaco y sus v¨ªctimas.
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