El Defensor del Pueblo hall¨® en 1996 cuatro casos de malos tratos en prisi¨®n
En 1996 se produjeron cuatro casos de malos tratos en tres prisiones espa?olas: Ja¨¦n, Huelva y Madrid. ?ste es uno de los datos que contiene el informe sobre la situaci¨®n de las c¨¢rceles presentado, ayer por el defensor del pueblo, Fernando Alvarez de Miranda. En el estudio se destaca tambi¨¦n el problema de la droga en las c¨¢rceles, el n¨²mero creciente de reclusos enfermos de sida y los problemas de reinserci¨®n.
En 1996 se produjeron cuatro casos probados de malos tratos en tres c¨¢rceles espa?olas: dos en Ja¨¦n, uno en Huelva y otro en Madrid. Este es uno de los datos recogidos en el Estudio sobre la situaci¨®n penitenciaria en Espa?a y los dep¨®sitos municipales de detenidos que Fernando Alvarez de Miranda present¨® ayer al presidente del Congreso, Federico Trillo, y que hoy se entregar¨¢ al del Senado.En el estudio, que recoge las 25 recomendaciones hechas por el Defensor a la Administraci¨®n Penitenciaria, se destaca el hacinamiento que sufren los presos de algunas c¨¢rceles y se sugieren medidas, como el aumento del presupuesto para comidas, para mejorar la calidad de vida de los internos. El importe diario de la comida de cada preso est¨¢ entre las 438 y las 501 pesetas, la misma cantidad fijada desde 1990.
El informe pone especial atenci¨®n en la situaci¨®n de los drogodependientes -definido como un "problema creciente"- y de los enfermos terminales. Segun ?lvarez de Miranda, los drogodependientes no reciben apoyo suficiente de la Administraci¨®n penitenciaria y aunque unos 40 centros disponen de un programa de metadona faltan centros para la rehabilitaci¨®n de estos presos.
El sida, seg¨²n el informe, ha dado lugar a que existan en las c¨¢rceles espa?olas un n¨²mero cada vez m¨¢s elevado de presos con padecimientos irreversibles, muy graves o en situaci¨®n terminal. El Defensor, que insiste en que "se debe dar prioridad al derecho a la vida del interno gravemente enfermo", solicita que a estos presos se les aplique el art¨ªculo del Reglamento que permite, eximirles del requisito de haber cumplido tres cuartas partes de la condena para obtener la libertad.
De las 25 recomendaciones presentadas por ?lvarez de Miranda, 16 han sido aceptadas plenamente, tres parcialmente, tres rechazadas y tres est¨¢n pendientes de respuesta. Entre las rechazadas se encuentra la referida al modo de registro personal de los presos, que incluye la pr¨¢ctica de cacheos con desnudo integral, flexiones o pruebas radiol¨®gicas. La Administraci¨®n Penitenciaria ha rechazado la petici¨®n de que estas pr¨¢cticas fueran comunicadas al juez de vigilancia penitenciaria.
Alvarez de Miranda destac¨® ayer en rueda de prensa que las c¨¢rceles deben esforzarse a¨²n m¨¢s por cumplir la funci¨®n de reinserci¨®n social, y expres¨® su convencimiento de que los presos de primer grado, los m¨¢s peligrosos, deben integrarse plenamente en las actividades de reeducaci¨®n.
Otros dos aspectos en los que el Defensor hizo hincapi¨¦ fueron la situaci¨®n de los j¨®venes y de las mujeres en las c¨¢rceles espa?olas. En 1987 hab¨ªa m¨¢s de 1.600 presas, un colectivo que el a?o pasado alcanzaba ya las 4.000. Alvarez de Miranda destac¨® las dificultades especiales de las presas que se ven en la necesidad de tener junto a ellas a sus hijos dentro de las prisiones.
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