Vecinos delatados por sus efectos
Los compa?eros planetarios de otras estrellas no pueden ser vistos directamente ni en luz visible ni en otra longitud de onda con los telescopios actuales. Su presencia debe ser deducida a partir de sus efectos gravitatorios en los movimientos de los astros. El m¨¦todo espectrosc¨®pico utilizado por muchos astr¨®nomos implica mediciones de la luz de una estrella que revelan ligeras oscilaciones de ¨¦sta acerc¨¢ndose o alej¨¢ndose del observador. La explicaci¨®n m¨¢s sencilla de ese movimiento radial es que un objeto acompa?ante est¨¢ tirando de la estrella. A partir de esos datos se calcula tambi¨¦n la masa del objeto en ¨®rbita.Otros cient¨ªficos han hecho la b¨²squeda con otros m¨¦todos, siguiendo durante a?os en el cielo el desplazamiento de una estrella por el espacio. Los astr¨®nomos intentan distinguir cualquier aceleraci¨®n o desaceleraci¨®n de un astro que indique que un objeto en ¨®rbita, como un planeta, est¨¢ conteniendo la estrella y despu¨¦s impuls¨¢ndola en su trayectoria. Con el paso de los a?os, esta t¨¦cnica ha dado pie a muchas falsas esperanzas, como cuando en este mismo siglo se crey¨® haber detectado dos objetos acompa?antes de la estrella Barnard. Al final result¨® que eran efectos de los instrumentos de observaci¨®n.
Los astr¨®nomos que utilizaban radiotelescopios fueron los primeros en dar en la diana de la b¨²squeda de planetas, en 1994.
Alexander Wolszczan, un radioastr¨®nomo de la Universidad Estatal de Pensilvania, comunic¨® la detecci¨®n de dos o quiz¨¢ tres objetos de dimensiones planetarias en ¨®rbita alrededor de una estrella en la constelaci¨®n de Virgo. Afirm¨® que era "una prueba definitiva de que el primer sistema planetario extrasolar ha sido inequ¨ªvocamente identificado" Aunque los cient¨ªficos aceptaron esta afirmaci¨®n, sufrieron una decepci¨®n. Wolszczan parece haber encontrado planetas, pero no alrededor de una estrella normal como el Sol, sino en compa?¨ªa de un p¨²lsar, el residuo denso y en rotaci¨®n de una estrella que ya ha explotado y se ha apagado. Pero un p¨²lsar no es lugar para albergar vida; all¨ª el medio ambiente carecer¨ªa de la c¨¢lida luz estelar.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.