Los 39 suicidas de la secta de San Diego daban culto a Internet y a los extraterrestres
Eran milenaristas, les apasionaba viajar con sus ordenadores a trav¨¦s del ciberespacio, re¨ªan en los encuentros en la tercera fase con los extraterrestres y estaban obsesionados por la higiene. No fumaban, no beb¨ªan alcohol y practicaban la castidad. Viv¨ªan en uno de los rincones m¨¢s lujosos del planeta: la urbanizaci¨®n Rancho Santa Fe, al norte de la localidad californiana de San Diego. Eran los adoradores de la M¨¢s Alta Fuente, y 39 de ellos fueron hallados muertos cuando era la madrugada del jueves en Espa?a, en lo que constituye el mayor suicidio colectivo de la historia reciente de EE UU.
Decenas de investigadores buscaban ayer pistas sobre las razones por las que 39 personas -21 mujeres y 18 hombres, la mayor¨ªa de entre 18 y 24 a?os, aunque hab¨ªa algunos de m¨¢s edad- decidieron terminar al un¨ªsono con sus vidas.[Entre los muertos hab¨ªa dos negros y algunos hispanos. El forense encargado del caso, el doctor Brian Blackbourne, revel¨® que los muertos llevaban encima papeles con instrucciones para cometer un suicidio. "Comer un pastel de manzana en el que se haya mezclado la medicina, beber una bebida que contenga vodka, tumbarse y relajarse" era la receta que muchos llevaban. La medicina pudo ser alcohol mezlcado con el barbit¨²rico fenobarbital, seg¨²n informa Efe. Seg¨²n Blackbourne, el suicidio pudo haberse cometido en tres etapas: mientras algunos de ellos llevaban muertos tres d¨ªas, otros presentaban signos de fallecimiento de 24 horas.]
En la casa de Rancho Santa Fe no hab¨ªa sangre, no hab¨ªa marcas en los cad¨¢veres, no hab¨ªa notas explicativas; ni tan siquiera, parafernalia religiosa, a no ser que se considere como tal los equipos inform¨¢ticos que ocupaban varias habitaciones.
Una primera respuesta lleg¨® cuando un hombre de negocios de Beverly Hills (Los Angeles) inform¨® de que uno de sus empleados, antiguo compa?ero de los fallecidos, hab¨ªa recibido dos v¨ªdeos en los que ¨¦stos se desped¨ªan y le explicaban sus razones. Unas razones muy inquietantes: el grupo cre¨ªa llegado el momento de "despojarse" de sus "contenedores" (sus cuerpos) para acudir a tina cita con una nave extraterrestre que, aseguraba, est¨¢ viajando tras la cola del cometa Hale-Bopp.Agentes del sheriff de San Diego efectuaron el macabro hallazgo en la tarde californiana del mi¨¦rcoles, madrugada del jueves en Espa?a. Recibieron una llamada an¨®nima inform¨¢ndoles de que se hab¨ªa producido un suicidio masivo en una direcci¨®n que el comunicante facilit¨®.
Parec¨ªa que dorm¨ªan: sus cuerpos estaban apaciblemente acostados en camas plegables y literas y no presentaban la menor se?al externa de violencia. Vest¨ªan de modo semejante: pantalones, camisas sin cuello y zapatillas de deporte, todo de color negro. Llevaban los rostros y pechos cubiertos con sudarios triangulares de color p¨²rpura.
"Ninguno ten¨ªa heridas de bala o de cuchillo", dijo Alan Fulmer, sheriff del condado de San Diego. Fulmer explic¨® que el fuerte olor que encontraron sus agentes les hizo pensar en un primer momento que alg¨²n gas hab¨ªa provocado las muertes, pero que pronto descubrieron que . se trataba de la descomposici¨®n de los cad¨¢veres.
Poco se sabe acerca del grupo y sus componentes. Hab¨ªan alquilado la casa el pasado octubre por entre 10.000 y 20.000 d¨®lares (entre 1,5 y 3 millones de pesetas) al mes a Sam Koutchesfahani, un hombre de negocios que, en un caso que no parece tener relaci¨®n con este suceso, se declar¨® culpable en 1996 de fraude y evasi¨®n de impuestos. Es una residencia de lo que en California se conoce como estilo mediterr¨¢neo espa?ol, con los muros pintados de colores cremosos, techos con tejas rojas y palmeras alrededor. Tiene nueve dormitorios, siete cuartos de ba?o, una piscina, una pista de tenis y un jard¨ªn.
La casa era la base de WWW Higher Source (la M¨¢s Alta Fuente del World Wide Web, el principal componente de Internet). En apariencia, Higher Source era un negocio dedicado a dise?ar p¨¢ginas (web sites) para empresas californianas que deseaban estar presentes en Internet. Sus componentes eran programadores de ordenadores.
Varios clientes de Higher Source describieron ayer a los ocupantes de la casa como j¨®venes con aspecto de pertenecer a una secta, pero buenos negociantes y eficaces profesionalmente. Tom Goodspeed cont¨® que WWW Higher Source dise?¨® un web site para el club de polo de San Diego que ¨¦l preside. Goodspeed visit¨® la casa y encontr¨® que sus habitantes eran "gente silenciosa, con cortes de pelo a cepillo y casi uniformados con ropas negras. Ten¨ªan un aspecto algo extra?o, pero tambi¨¦n todo el aire de sentarse delante de un ordenador y saber lo que estaban haciendo. Hicieron un trabajo estupendo para nuestro club".
Seg¨²n Goodspeed y otros clientes, los j¨®venes parec¨ªan obedecer a un hombre de m¨¢s edad al que llamaban padre John. Un tal hermano Logan parec¨ªa el segundo a bordo. Todos eran muy limpios y austeros. Dec¨ªan no fumar, no beber alcohol, practicar el celibato y dormir en literas.
Bill Grivas, un vecino, cont¨® que, hace unas semanas, se acerc¨® a la casa para ver si estaba en venta y que escuch¨® c¨®mo sus ocupantes se calificaban de "monjes". "Me pareci¨® entender", dijo Grivas, "que se consideraban ¨¢ngeles de la inform¨¢tica".
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