Yeltsin y Lukashenko sellar¨¢n ma?ana con un tratado la nueva Uni¨®n de Rusia y Bielorrusia

El tratado de uni¨®n entre Rusia y Bielorrusia, que los presidentes de ambos pa¨ªses firmar¨¢n ma?ana en Mosc¨², era corregido apresuradamente ayer en la capital rusa para darle un car¨¢cter m¨¢s moderado y formal. El objeto de los retoques ten¨ªa un doble fin: neutralizar la fuerte oposici¨®n de los sectores liberales ante la fusi¨®n entre dos pa¨ªses con pol¨ªticas y econom¨ªas cada vez m¨¢s diferenciadas y simult¨¢neamente no ofender a los patriotas eslavos. "El tratado est¨¢ siendo vaciado de contenido", seg¨²n manifest¨® ayer a EL PA?S un pol¨ªtico que particip¨® en la elaboraci¨®n.

Con este texto, Bor¨ªs Yeltsin y Aleksandr Lukashenko deben dar un paso m¨¢s hacia la integraci¨®n com¨²n, al cumplirse el primer aniversario de la Comunidad de Rep¨²blicas Soberanas (CRS). Esta entidad amorfa ha tenido pocos resultados pr¨¢cticos, pero Bielorrusia constituye una pieza importante en la estrategia de Mosc¨² para responder a la ampliaci¨®n de la OTAN hacia el Este, a Hungr¨ªa, Rep¨²blica Checa y Polonia.Tras sucesivas elaboraciones, el tratado ahora en liza se ha transformado por sorpresa en un confuso documento que, de ser firmado en las versiones filtradas hasta ahora, probablemente convertir¨ªa a Rusia y Bielorrusia en un nuevo sujeto de derecho internacional. La cr¨ªtica rusa se ha centrado sobre todo en la posible inconstitucionalidad del tratado y en sus consecuencias econ¨®micas, ya que amenaza la pol¨ªtica de ajuste rusa.

La variante definitiva del tratado que firmar¨¢n el presidente Bor¨ªs Yeltsin y su colega bielorruso, Aleksandr Lukashenko, era una inc¨®gnita ayer. Yeltsin, que estaba en su residencia Gorki 9, en las afueras de Mosc¨², trabajaba en los documentos para crear la "Uni¨®n de Rusia y Bielorrusia", seg¨²n su asesor de pol¨ªtica internacional, Dmitri Riurikov. Este funcionario dijo que Yeltsin tiene una impresi¨®n "positiva" del proyecto de tratado, pero puntualiz¨® que en ¨¦ste "a¨²n pueden ser introducidas algunas correcciones".

El Gobierno, dividido

El tratado con Bielorrusia ha dividido al Gobierno. Mientras V¨ªktor Chernomirdin es partidario del mismo, los viceprimeros ministros, Anatoli Chub¨¢is y Bor¨ªs Nemtsov, est¨¢n en contra y aparentemente han intentado convencer al presidente para que no estampe su firma. En diciembre de 1991, Yeltsin fue uno de los tres dirigentes eslavos que firmaron la sentencia de muerte de la Uni¨®n Sovi¨¦tica tras el fallido golpe de Estado contra Gorbachov. Posteriormente, el l¨ªder ruso ha tratado de enmendar con iniciativas integradoras la impresi¨®n de haber destruido un patrimonio que muchos a?oran.Tras su firma, el texto ser¨¢ sometido a los Parlamentos de Bielorrusia y Rusia. Su ratificaci¨®n se da por segura, dada la composici¨®n pol¨ªtica de estas C¨¢maras.

El m¨¢ximo ¨®rgano dirigente de la Uni¨®n ser¨¢ el Consejo Supremo, organismo que incluye a los presidentes, los primeros ministros y los jefes de las C¨¢maras parlamentarias de ambos pa¨ªses, as¨ª como el secretario ejecutivo de la nueva formaci¨®n. Este ¨®rgano toma sus decisiones por unanimidad de acuerdo con el principio "un Estado, un voto", lo que pone en pie de igualdad a Bielorrusia, con 10 millones de habitantes, y a Rusia, que tiene aproximadamente 150 millones.