El gran invento

EL DIRECTOR general de Tr¨¢fico ha tenido la ocurrencia de atribuir el aumento de v¨ªctimas en accidentes de carretera registrado este a?o durante las vacaciones de Semana Santa a... ?la buena marcha de la econom¨ªa nacional! Grandioso invento dial¨¦ctico: lo que va bien se debe a la buena gesti¨®n del Ejecutivo; lo que va mal es un efecto inevitable de esa buena gesti¨®n. Es casi mejor que lo de la herencia recibida.Claro que ya hubo un peri¨®dico que atribu¨ªa cada muerto en la carretera a la cuenta personal del (anterior) presidente del Gobierno, por no haberlas arreglado a tiempo. Esta inefable ocurrencia del responsable de Tr¨¢fico no deja de ser una original aportaci¨®n al viejo y nunca resuelto debate sobre las causas de los accidentes. Si el luto en las carreteras es proporcional a la bonanza econ¨®mica, ¨¦chense a temblar los conductores suizos, norteamericanos y dem¨¢s habitantes de pa¨ªses ricos.

Tonter¨ªas aparte, s¨ª cabe plantearse por qu¨¦ este a?o ha aumentado en tomo al 10% el n¨²mero de v¨ªctimas mortales del tr¨¢fico durante la Semana Santa, quebrando una tendencia a la baja de varios a?os. Y por qu¨¦ ya en la operaci¨®n retorno de navidades en enero el caos circulatorio y la incapacidad de la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico para hacerle frente fueron manifiestos. Sin olvidar el factor inevitable de la fatalidad, habr¨ªa que recordar que, por primera vez en muchos a?os, la DGT no ha iniciado antes de estas vacaciones sus campa?as publicitarias en televisi¨®n; campa?as que, por lo dem¨¢s, Mu?oz Repiso considera efectivas.

Al parecer, no le ha dado tiempo a la Direcci¨®n General. Alegar dificultades de contrataci¨®n no parece una justificaci¨®n aceptable. ?O es que la Semana Santa ha pillado por sorpresa a la DGT? Le hubiera bastado consultar un calendario perpetuo. Al fin y al cabo, el Gobierno no tiene a¨²n, que se sepa, capacidad para modificar por decreto-ley la Semana Santa, aunque as¨ª lo exigiera el inter¨¦s general.