El Talgo que descarril¨® en Azuqueca circulaba a 153 kil¨®metros por hora en una zona de 50

El Talgo que descarril¨® en Azuqueca de Henares (Guadalajara) la madrugada del pasado martes Circulaba a 153 kil¨®metros por hora en una zona limitada a 50, seg¨²n han podido averiguar los t¨¦cnicos de Renfe tras examinar la caja negra del tren. Al igual que en la tragedia de Uharte-Arakil (Navarra), ocurrida unas horas antes, las investigaciones apuntan como causa del accidente a un fallo del maquinista, que no vio o no atendi¨® las se?ales. En los dos accidentes murieron en total 20 personas y otras 73 resultaron heridas.

Los t¨¦cnicos de Renfe que investigan los accidentes no han encontrado ninguna deficiencia t¨¦cnica: la v¨ªa se encontraba en buen estado, las se?ales eran correctas, y las m¨¢quinas funcionaron a la perfecci¨®n. Al parecer, s¨®lo fallaron los maquinistas. Unos errores que resultan todav¨ªa m¨¢s incomprensibles si se tiene en cuenta que en ambos casos viajaban acompa?ados de un ayudante, cuya misi¨®n -seg¨²n el reglamento de Renfe- es auxiliar en todo momento al maquinista y advertirle de viva voz de las posibles incidencias de la circulaci¨®n.Tanto el Talgo de Azuqueca como el Intercity de Uharte se encontraron unos 1.800 metros antes de las respectivas estaciones sendas "se?ales avanzadas" que les obligaban a reducir la velocidad. Al primero, a 50 kil¨®metros por hora, y al segundo, a 30. Uno y otro siguieron a la velocidad que llevaban (el Intercity, a 137 kil¨®metros por hora) y se encontraron a las puertas de la estaci¨®n con una "se?al de entrada" en la que les avisaban de que cambiaban de v¨ªa. Ambos descarrilaron en el cambio de agujas. Las especiales caracter¨ªsticas del Talgo hicieron que se sujetara a la v¨ªa sin llegar a descarrilar en su totalidad. Eso y la baja ocupaci¨®n del tren (s¨®lo 54 personas) evitaron una tragedia mayor. Suplemento Domingo