La ONU denuncia la impunidad del tr¨¢fico de miles de mujeres

El tr¨¢fico de mujeres es un comercio floreciente contra ¨¦l que pocas medidas internacionales han sido tomadas, sostiene la ONU. La relatora, especial de Naciones Unidas encargada de la violencia contra las mujeres denuncia que, cada a?o miles de mujeres son intercambiadas a cambio de dinero.

"Son golpeadas, obligadas, secuestradas, vendidas y hasta forzadas a vivir y a trabajar en condiciones equiparables a las de un esclavo. Esa es la condici¨®n de las prostitutas, empleadas dom¨¦sticas, esposas o trabajadoras clandestinas", escribe en su texto Radhika Coomaraswamy. La funcionaria de la ONU atribuye esta lacra a la pobreza, el racismo, el sexismo, la industria tur¨ªstica y la complacencia de muchos Estados.

Seg¨²n el informe, en Jap¨®n existen m¨¢s de 700 intermediarios especializados en este tipo de tr¨¢fico. En Estados Unidos las cosas no andan mejor. Cientos de empresas ofrecen mujeres al mejor postor, y su estima entre 2.500 y 5.000 el n¨²mero de los hombres norteamericanos que han comprado mujeres del Tercer Mundo como esposas.

Modernidad obliga: en este comercio tambi¨¦n intervienen las autopistas de la informaci¨®n e Internet se ha, convertido en un instrumento privilegiado de estos cambios. En las p¨¢ginas www, los intermediarios no s¨®lo hacen publicidad de sus empresas, sino que se anuncian igualmente los perfiles de las mujeres propuestas en venta.

En Europa no existen mecanismos jur¨ªdicos que inviten a las mujeres a denunciar los hechos a la polic¨ªa, salvo en B¨¦lgica y en Holanda. Las prostitutas que llegan a los pa¨ªses de la Uni¨®n Europea, por ejemplo, se encuentran completamente desarmadas frente a la "violencia de los agentes del Estado", como las oficinas de polic¨ªa o los servicios de inmigraci¨®n. Frente a ¨¦stos las mujeres se encuentran frecuentemente sin documentaci¨®n, no pueden expresarse en la lengua del pa¨ªs al que llegan y, evidentemente, no conocen los derechos a los cuales pueden acogerse.

Miedo

De acuerdo al informe de Coomaraswarny, las mujeres tienen, miedo a denunciar los hechos. "Temen ser arrestadas o condenadas. Temen sufrir represalias o ser expulsadas. Temen, no seguir sosteniendo a sus familias. Los paises de donde ellas provienen no tienen inter¨¦s en ponerle un coto a estas actividades porque as¨ª favorecen la entrada de divisas. A los pa¨ªses destinatarios les cuesta caro resguardar su territorio de las personas que residen en ¨¦l irregularmente, de manera que se contentan con devolver a las v¨ªctimas", denuncia el informe.La relatora especial de la ONU propone un di¨¢logo internacional con el prop¨®sito de elaborar nuevas normas jur¨ªdicas sobre el tr¨¢fico de mujeres. Plantea la necesidad de mecanismos de colaboraci¨®n y un seguimiento de las actividades de los Estados.